La representación del Vía Crucis en Villa Palito, La Matanza, llegó a un repentino y violento desenlace cuando una persecución a tiros entre la policía y delincuentes en fuga interrumpió la procesión. El estruendo de las sirenas y los disparos provocó consternación en medio de la ceremonia, desatando una estampida. Afortunadamente, no se reportaron heridos.
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El incidente se originó cuando los criminales, huyendo de la policía, se encontraron con la celebración religiosa. Intentaron escapar a pie y se enfrentaron a tiros con los agentes de la policía bonaerense que los perseguían. Uno de los tres delincuentes fue capturado; los otros dos lograron evadirse y actualmente están siendo buscados.
Un video expuesto por Arriba Argentinos y ampliamente difundido en redes sociales, fue grabado por un espectador utilizando un teléfono celular. Capturó el momento exacto en que la situación se descontroló durante la ceremonia religiosa en la plaza. “Ay, Dios, los chicos”, exclamó una mujer en medio de la desesperación. “Abajo, abajo”, gritón tras escuchar una detonación.
De acuerdo con el reporte de Primer Plano, el incidente ocurrió durante el atardecer del Viernes Santo, en la esquina de las calles Padre Bachi y Derqui, donde se había instalado un control policial. Los sospechosos intentaron atravesar el control a bordo de un Nissan Versa blanco. Cuando la policía intentó detenerlos para solicitar su documentación, el vehículo aceleró, desencadenando una persecución inmediata.
El Nissan Versa blanco, que estaba siendo buscado, fue el protagonista de la persecución a tiros. Los disparos se iniciaron en los primeros momentos de la persecución. Esta terminó en la plaza frente a la Parroquia del barrio, aproximadamente a siete cuadras de donde comenzó, en Padre Bachi y Chile.
En ese lugar se llevaba a cabo el Vía Crucis, una representación que conmemora el camino de Cristo hacia la crucifixión y se celebra cada Viernes Santo. Este año, estaba siendo interpretado por un grupo de jóvenes de la parroquia local. Sin embargo, la ceremonia fue abruptamente interrumpida por el sonido de las sirenas de la Policía Bonaerense y el estallido de balas en plena calle. En cuestión de segundos, el orden se convirtió en caos.
Los jóvenes corrieron y trataron de huir como pudieron. En medio de la confusión, los delincuentes detuvieron el vehículo, que estaba siendo buscado, y trataron de escapar a pie.
Según fuentes policiales, una vez que la persecución en automóvil llegó a su fin, los agentes utilizaron disparos de escopeta con postas de estruendo para evitar que los delincuentes se dieran a la fuga. Sin embargo, tanto el conductor como el pasajero lograron escapar. Solo el ocupante del asiento trasero, identificado como Andrés Freddy Villarroel Yañez, de 49 años y nacionalidad chilena, fue capturado.
Se informó que el Nissan Versa había sido robado en la Ciudad, lo que resultó en una orden de secuestro. El detenido enfrenta cargos por encubrimiento y resistencia a la autoridad, y quedó bajo la jurisdicción del fiscal Gastón Bianchi, a cargo de la Fiscalía N.º 3 de La Matanza.
El enojo del obispo de San Justo: “La inseguridad y la muerte bailan una danza macabra en nuestros barrios”
Si bien el incidente ocurrió el viernes por la noche, cobró relevancia en las últimas horas tras el comunicado emitido por el obispo de San Justo, Eduardo García, al respecto: “Las noticias duran un día, pero las realidades permanecen. La inseguridad y la muerte bailan una danza macabra en nuestros barrios”.
Asimismo, recordó: “Inauguramos el año con la noticia de la masacre en la tosquera, el fusilamiento en San Petersburgo de varios jóvenes, el reparto de armas como regalo de Reyes. Inseguridad, corrupción, narcotráfico y robo express conforman la realidad cotidiana, conviviendo con escenas que estrujan la mirada y el alma”.
“La Semana Santa no podía estar al margen de esta situación. La procesión de Ramos en los monoblocks de La Tablada debió ser abortada por un tiroteo a plena luz del día. Anoche, el Vía Crucis en Villa Palito organizado por adolescentes, se vio interrumpido por una persecución policial a pocos metros del lugar donde estaba reunida la comunidad”, recordó el obispo.
En el comunicado, el obispo señala que “las escenas actuales estrujan la mirada y el alma”, y advirtió: “La inseguridad y la muerte bailan una danza macabra en nuestros barrios
El comunicado, al que tituló “No a la buena de Dios, sino a la mala de los Hombres” fue publicado este sábado por el obispado de San Justo.
