Un nuevo ataque de rugbiers en Zárate, provincia de Buenos Aires, causó conmoción y preocupación. Según se relató en Arriba Argentinos, todo ocurrió en el marco de las celebraciones del Día del Amigo este sábado, en donde un grupo de jugadores agredió brutalmente a un joven de 19 años en el Club Náutico Arsenal de Zárate.
El joven fue golpeado mientras estaba de pie y, al caer al suelo, recibió varias patadas en la boca, causándole una herida que requirió dos puntos de sutura en los labios. También sufrió una fuerte patada en la sien. Fue atendido de inmediato por los servicios de emergencia, y una tomografía confirmó que no había sufrido lesiones graves.
Tras el incidente, la Policía identificó a los agresores, y los directivos del club informaron que el principal atacante ya había sido expulsado de la institución por haber estado involucrado en una pelea anterior en un boliche de la ciudad. La fiesta no fue organizada por el Club Náutico Arsenal de Zárate, sino por dos boliches locales.
La angustia de la madre del joven: “Hoy me pudo haber tocado a mí”
La madre del joven, Natalia, comentó que la intervención de varias personas en la fiesta evitó que el incidente se convirtiera en una tragedia. “Hoy me pudo haber tocado a mí ser como la mamá de Fernando Báez Sosa”, expresó Natalia en sus redes sociales.
Aunque dejó claro que no pretende estigmatizar a todos los jugadores de rugby, manifestó su preocupación por el aumento de la violencia relacionada con este deporte.
“Afortunadamente, hoy puedo decir que mi hijo no sufrió lesiones graves gracias a la gente que pudo frenar la golpiza”, dijo la mujer.
