La mañana de este domingo, un incidente preocupante ocurrió a bordo de un vuelo de la aerolínea mexicana Volaris. Un pasajero del vuelo 3041, que cubría la ruta entre El Bajío, en el centro de México, y Tijuana, en la frontera con Estados Unidos, intentó apoderarse del avión y desviar su destino hacia territorio estadounidense. Gracias a la intervención inmediata de la tripulación, el hombre fue detenido y puesto a disposición de las autoridades, informó la compañía en un comunicado oficial.
Según la aerolínea, el pasajero empleó la fuerza en su intento de desviar la aeronave. En respuesta, la tripulación siguió los protocolos de seguridad establecidos, logrando desviar el vuelo al aeropuerto de Guadalajara, donde el individuo fue entregado a las autoridades correspondientes.
Volaris confirmó que tanto los pasajeros como la tripulación y la aeronave se encuentran a salvo. Asimismo, detalló que los pasajeros fueron protegidos y asistidos para continuar su viaje hacia su destino final en Tijuana.
En su comunicado, la aerolínea expresó su firme postura al señalar que se constituirá como parte acusadora en un eventual proceso judicial contra el responsable, asegurando que enfrentará “todo el peso de la ley, hasta sus últimas consecuencias”. Además, lamentó los inconvenientes ocasionados a los pasajeros debido a esta situación excepcional.
Según el personal de la operadora Volaris, “el agresor les comentó que habían secuestrado a un familiar cercano y que, al momento de despegar de León, recibió una amenaza de muerte si viajaba a Tijuana”, añadió el reporte respecto del agresor, que viajaba con su esposa y dos hijos menores de edad.”
Hasta el momento, no se han revelado detalles sobre la identidad del pasajero ni las razones que lo llevaron a intentar desviar el avión hacia Estados Unidos. El incidente se encuentra bajo investigación.
“El piloto se murió”: el dramático mensaje de la tripulación a la torre de control en pleno vuelo
Un piloto de la compañía Turkish Airlines falleció en pleno vuelo mientras pilotaba un avión que había despegado de Seattle (noroeste de Estados Unidos) y se dirigía a Estambul (oeste de Turquía) este miércoles 9 de octubre, tal como informó la compañía aérea.
“El piloto se murió”, avisó la tripulación a la torre de control del aeropuerto JFK de la ciudad de Nueva York para que le fuera autorizado un aterrizaje de emergencia. El vocero de la aerolínea, Yahya Üstün, dio los detalles a través de un posteo en la red X.
“El capitán de a bordo de nuestro avión Airbus A-350 del vuelo TK204 se desmayó en medio del vuelo. Tras un intento sin éxito de primeros auxilios, nuestra tripulación (compuesta por dos pilotos más) decidió realizar un aterrizaje de emergencia, pero nuestro capitán falleció antes de aterrizar”, escribió el empleado de la Turkish Airlines.
El piloto, que tenía 59 años y trabajaba en la empresa desde 2007, había realizado su último chequeo médico periódico a principios de marzo pasado sin ninguna anomalía a reportar, de acuerdo con la empresa.
