El escándalo con la jueza Julieta Makitanch sigue sumando nuevos episodios y, después de la suspensión del proceso, se revelaron más detalles indignantes del documental “Justicia Divina” que la magistrada estaba grabando.
En Arriba argentinos expusieron detalles del guión que Makitanch seguía y que condicionaba su accionar dentro del juicio. “La doctora Julieta Makitanch se prepara para comenzar un día que no es cualquiera. Elige la ropa, se maquilla, desayuna a las apuradas. Es una mujer bella y de muy buen look”, dice una de las partes del texto leído en el aire.
Este documento continúa con una puesta en escena cinematográfica que sigue a la jueza desde su llegada al juzgado hasta su rol central en el proceso.
“Estamos en el juicio de Maradona en el primer día. Entran los jueces, la cámara de forma íntima sigue a la doctora Makintach, toma asiento en su lugar, todo se acomoda para que se dé inicio. Vemos imágenes del inicio del juicio, siempre con foco en la doctora Makintach y sus movimientos”, sigue el documento.
Tal como afirmaron en Arriba argentinos, lo más grave del caso no es la teatralización del proceso, sino que en el documental se adelantan los pasos del juicio y se anticipa la postura final de la jueza sugiriendo su veredicto antes de que se presentaran todas las pruebas. “El final ese estaba escrito”, dijeron en el programa “un 33% del veredicto estaba guionado”.
Las escenas que entorpecieron al juicio
Más allá de lo inconstitucional de este accionar, se acusa a la jueza Julieta Makintach de haber llevado a cabo acciones innecesarias para poder seguir este guión establecido.
Según revelaron en Arriba argentinos, Makintach ordenó la detención de un testigo y el allanamiento de una clínica para agregar dramatismo al documental lo que, indudablamente, pone en duda la imparcialidad y la legalidad del proceso.
La Fiscalía pidió no solo el apartamiento de Makintach, sino también el de los otros dos jueces del Tribunal Criminal Número 3 de San Isidro, al considerar que todo el proceso quedó “contaminado”. Para los fiscales, la participación de la jueza en el documental arrastró a todo el tribunal y echó por tierra la validez del juicio oral y público por la muerte del “Diez”.
