En Buenas noches Familia, el programa conducido por Guido Kaczka, se vivió un momento profundamente emotivo que conmovió a todos los presentes y a quienes lo seguían desde casa. Un hombre que atraviesa un tratamiento contra el cáncer, llegó al estudio con una intención clara: adoptar una perrita en busca de compañía.
La protagonista de cuatro patas era Pita, una perrita rescatada en estado de desnutrición, abandonada en cercanías de las vías del tren. Su historia, como la de tantos animales en situación de calle, fue compartida con emoción por un rescatista comprometido con la causa.
“Es muy difícil rescatar animales. Hoy tengo 500 más como ella con millones de historias. Pero ella llegó feliz, de la calle, desnutrida… Es optimista”, contó con lágrimas en los ojos.
El hombre que fue en busca de la mascota, visiblemente emocionado, no dudó en compartir el difícil momento personal que está atravesando. “Estoy pasando un momento… Tengo cáncer. Dos operaciones encima y ahora estoy en quimioterapia. Me hace falta una compañía”, reveló con la voz quebrada.
Y agregó: “Siempre tuve perros. Tuve caniche, ovejero alemán, una pitbull hermosa. Pero ahora estoy acá, firme, bancándola con la ayuda de mi familia”.

Guido Kaczka se quebró al escuchar el testimonio de Eduardo
El testimonio tocó el corazón de todos. Incluso al propio Guido, quien no pudo evitar quebrarse al escuchar las palabras de Eduardo: “Yo siento que no estoy haciendo, me están haciendo… De verdad lo digo, lo hablo con mi mujer. No sé si suena a cuento, pero me pasa”.
En medio de la emoción, el gesto de amor se concretó. Pita, la perrita que sobrevivió al abandono, encontró una nueva familia. “Gracias por visibilizar esto. Adoptar salva vidas”, dijo el rescatista. El cierre del programa se concretó con la perrita besando a su nuevo compañero.