El beso francés es un gesto íntimo y apasionado, pero también es un detalle que implica a la salud bucal, así lo explicó el doctor Guillermo Capuya en La mañana con Moria. Mientras hablaban del caso del hombre que falleció tras someterse a una cirugía de implantes, el especialista llevó al programa datos científicos precisos que generaron sorpresa en la Moria, y que luego derivaron en una reflexión más amplia sobre cómo se besa en la actualidad.
Todo comenzó cuando Capuya dijo: “Me quedé con el tema del beso francés. El tema de las bacterias que estaba escuchando que vos decías, Moria…”, introdujo el médico. En ese momento lanzó una pregunta que incomodó y divirtió por igual: “¿Ustedes alguna vez compartieron el cepillo de dientes con alguna pareja?”
La respuesta inmediata llegó desde el panel: “No, no, no. Yo cuando me mudé a la casa de Galmarini ya tenía mi cepillo de dientes”, comentó Moria, fiel a su estilo, agregó entre risas: “Me lo había comprado él, claro”.
Pero el doctor estaba decidido a profundizar en la parte científica. Basado en un estudio realizado en Holanda, Capuya explicó que un beso francés prolongado puede generar un intercambio microbiano sorprendente.
“Un beso que dura más de 10 segundos, un beso de lengua que dura más de 10 segundos, boca abierta, boca abierta, se intercambia en 10 segundos 80 millones de bacterias aproximadamente”.

El dato generó impacto inmediato. Sin embargo, Capuya fue más allá: “Aquellas parejas que se besaban con este tipo de besos nueve veces por día o más, tenían la misma flora, la misma microbioma dentro de la boca”. Es decir, cuanto más se besan dos personas de manera intensa, más similar se vuelve su microbioma oral.
El giro inesperado: Moria y su crítica a los besos de película
La información científica derivó en uno de esos momentos característicos de Moria Casán. La conductora planteó un diagnóstico muy personal sobre los besos en el cine moderno: “Yo pienso que también se ha perdido mucho el beso en estos casos. El beso cinematográfico… Enseguida se hacen un koala, se empiezan a sacar la ropa, enseguida van por el sexo”, dijo la One.
Para Moria, la pérdida de la narrativa romántica en pantalla es evidente: “El beso de las películas de antes, ese beso romántico que se agarraban y… Largo. Es que toda la cosa sexual, toda la cosa iba… Estoy hablando de la cosa romántica”, remarcó Casán.
Y fue aún más contundente al comparar las escenas actuales: “Ahora viste cualquier película, enseguida sexo, sexo, sexo, sexo. Siempre hace lo mismo, me saco la ropa desesperada… No hay previa”. Su crítica cerró con una frase sin filtros: “Tampoco es creíble. Esas escenas de sexo actuales son un papelón que harta me tienen”.



