Fiona Harvey, la mujer que habría servido como inspiración para componer el personaje de Martha, la acosadora de la serie “Bebé Reno”, avisó que piensa demandar a Netflix por más de 170 millones de dólares por difamarla en el programa sobre la vida del humorista Richard Gadd.
Harvey, que es de origen escocés, fue retratada en la serie a través del personaje de Martha, interpretado por Jessica Gunning, y por eso acusa a la plataforma de streaming de difamación, imposición intencional de angustia emocional, negligencia y violación de su derecho de publicidad.
La demanda fue presentada este jueves 6 de junio en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Central de California y afirma que Netflix difundió “mentiras brutales” sobre ella en “Baby Reindeer”, tal su nombre original.
“Las mentiras que los demandados contaron sobre Harvey a más de 50 millones de personas en todo el mundo incluyen que Harvey es una acosadora condenada dos veces que fue sentenciada a cinco años de prisión y que agredió sexualmente a (Richard) Gadd”, figura en el escrito presentado por sus abogados.
Y agrega: “Los Demandados contaron estas mentiras, y nunca se detuvieron, porque era una mejor historia que la verdad, y las mejores historias generan dinero”.
La disputa entre la verdadera Martha de “Bebé reno” y Netflix
“Como resultado de las mentiras, mala conducta y conducta imprudente de los demandados, la vida de Harvey ha sido arruinada. Simplemente, Netflix y Gadd destruyeron su reputación, su carácter y su vida”, prosigue la demanda, que va solo contra Netflix y no contra el comediante.
Sobre el hecho de que la serie comience con un aviso de que se trata de “una historia verdadera”, la demanda añade que “es la mayor mentira en la historia de la televisión. Es una mentira contada por Netflix y el creador del programa, Richard Gadd, por codicia y deseo de fama; una mentira diseñada para atraer a más espectadores, obtener más atención, ganar más dinero y destruir vilmente la vida de la demandante, Fiona Harvey, una mujer inocente difamada por Netflix y Richard Gadd a una magnitud y escala sin precedentes”.
