La tía de la nena arrebatada de los brazos de su mamá por la Policía del Chaco ante una orden de la Justicia no pudo contener su angustia y mostró todo su desconsuelo en diálogo con Mediodía Noticias por lo que le pueda suceder a su sobrina en la casa de la familia del padre, quien fue acusado de abuso sexual.
“Muy triste porque nosotros vivimos la situación cuando C. tenía 3 años y, claramente, yo todavía no sabía que pasaba este momento tan feo las noches cuando la traíamos acá, porque también la familia pedía horarios nocturnos para verla, y nosotros las cuidábamos por la tarde”, empezó confesando la joven.
La desesperación de la tía de la nena
Y prosiguió: “O así, cuando venía de visita y ella (se quiebra)…, me acuerdo patente que me llevó a mi pieza y me hizo así… silencio, cerró la puerta la chiquita... Hizo así, silencio (hace el gesto), y yo noté algo extraño, sentí algo dentro mío que decía ‘¿por qué algo va a ser secreto para alguien tan chiquitita?’. Y ahora me tuve que enterar por las malas que eso era una señal, y que esté ahora en esta casa no nos deja tranquilos”.
“Estoy pensando todo el tiempo, ¿qué está haciendo?, ojalá que la estén conteniendo bien, que la esté pasando bien. Pero la queremos ver. Rezamos por ella, pedimos a Dios que él está viendo todo eso, por favor que la cuide. Yo tengo 25 años y tuve que conocer todos estos signos de abuso por carne propia y no se lo deseo a nadie”, dijo la joven, desesperada, y luego se puso a rezar de rodillas frente a la puerta de la casa de la familia paterna donde se encuentra su sobrina en estos momentos.
