Un hecho insólito pero con final feliz ocurrió en el barrio Patricios Oeste, en la ciudad de Córdoba, cuando un delincuente intentó ingresar a una vivienda por el fondo sin saber que lo esperaban dos heroínas: Mora y Atenea, las perras de la familia.
Ignacio González Prieto reconstruyó con imágenes de cámara de seguridad la secuencia del frustrado robo. “Creyó que era fácil, pero casi se lo comen las perras. El delincuente no sabía que en ese patio estaban ellas, de manera sigilosa, adentro”, narró en Mediodía noticias.

Según detalló el periodista, el delincuente bajó lentamente por el tapial, se puso la capucha, observó el lugar y comenzó a avanzar. “Qué mal la pasó. Lo tenían acorralado”, describió.

Y agregó: “Lo mordieron, lo corrieron, lo sacaron del patio las dos perritas, Mora y Atenea. Se transformó en una especie de equilibrista de un circo al tratar de escapar a través del tapial. Como el Hombre Araña”.
La palabra de la dueña: “Fueron realmente unas heroínas”
Desde el lugar de los hechos, la cronista Jimena Pérez entrevistó a Mónica, la dueña de casa, quien contó cómo vivió la situación y el rol clave de sus mascotas.
“Nos podrían haber llevado todo lo que teníamos en el patio, que teníamos mucho. Ellas fueron realmente unas heroínas. Lo ahuyentaron y no se pudo llevar nada”, relató.
Mónica explicó que esa noche escucharon ladridos, pero no imaginaron que se trataba de un intruso. “Yo pensaba que eran gatos que andaban en el techo. Ya se había ido cuando nosotros advertimos y prendimos la luz”, dijo.

La mujer también mencionó que, días anteriores, habían hecho una mudanza y por eso había objetos en el patio.
A pesar del susto, Mónica agradeció el desenlace: “Gracias a Dios fue con un final feliz. No se robó nada el delincuente, pero también por el ladrón feliz también, porque en las perras no le hicieron nada. Un susto”.