El escándalo entre Cinthia Fernández, su pareja Roberto Castillo y la ex del abogado, Daniela Vera Fontana, no deja de sumar capítulos cargados de tensión. En las últimas, la mujer rompió el silencio en Mujeres Argentinas y dio su versión de los hechos ocurridos el fin de semana, cuando un intercambio entre los tres se volvió viral a raíz de videos difundidos por la periodista Fernanda Iglesias.
Lo que parecía ser una entrega más dentro de un régimen de visitas entre Castillo y Fontana, se convirtió en una escena de gritos y acusaciones cruzadas que dejó al descubierto un trasfondo de violencia, denuncias formales y un reclamo que va más allá del espectáculo: la seguridad y el bienestar de dos niñas.
Daniela Vera Fontana fue clara desde el inicio de la entrevista con Belén Ludueña: “Esto no es porque quiero hacerme famosa ni porque esté despechada. Solté hace rato. Lo único que no voy a permitir es la violencia del padre de mis hijas y mucho menos de Cinthia”, disparó.
La situación que desató el escándalo tuvo que ver con la ausencia de sillitas de seguridad en el vehículo con el que Castillo y Fernández iban a trasladar a las menores. “No es la primera vez que se las quieren llevar sin sillitas”, explicó Daniela. “Solo quería que mis hijas viajen seguras. Y cuando pedí eso, ella bajó enajenada, cuando no había motivo. Me las querían sacar de los brazos”, relató visiblemente angustiada.
La denuncia formal de Daniela Fontana tras el fuerte conflicto con Cinthia Fernández y Roberto Castillo
En los videos que trascendieron en las redes y que compartieron en el programa, se observa cómo Cinthia le exige a Fontana que se retire del auto mientras esta graba la escena, preocupada por la falta de medidas de seguridad para sus hjas. En otra grabación, se perciben los forcejeos y discusiones entre Castillo y su ex en plena vía pública.
Ante la consulta de si había sufrido situaciones de violencia, Daniela aseguró que sí: “Ella bajó con la cara transformada. Cuando Roberto le pidió que me grabe, fue directo a sacarme a las nenas. Me gritaba ‘rajá de acá’, sin razón alguna”. Además, dejó entrever algo aún más grave: que Castillo habría manejado en estado de ebriedad en más de una ocasión mientras trasladaba a las menores.
“Yo ya hice la denuncia, jamás había pisado la vereda de la OVD. Vivo sola con mis hijas, tengo miedo”, agregó.
En otro tramo de la entrevista, Daniela aclaró que existe un acuerdo legal homologado con Castillo respecto a la tenencia y los días de visita, y que su intervención del fin de semana fue precisamente para no quedar expuesta a futuras denuncias por entorpecer el vínculo entre el padre y las hijas. “Si no tengo pruebas de que no hay sillitas, él me acusa de impedir el contacto. Entonces fui a registrar lo que pasaba. Es abogado, sabe cómo jugarme”, explicó.

La versión de Cinthia Fernández
Sobre los señalamientos de Cinthia Fernández, quien la acusó de buscar fama a través del conflicto, fue contundente: “¿Cómo voy a querer ser famosa con violencia, con mis hijas en el medi? Esto no me favorece”, aclaró.
Del otro lado, Cinthia Fernández sostuvo que tiene pruebas que la respaldan y calificó la actitud de Fontana como una “estrategia para victimizarse”. Por su parte, Roberto Castillo habría mencionado cifras millonarias en concepto de cuota alimentaria y alquiler, buscando contrarrestar las acusaciones públicas.
Daniela prefirió no hablar de montos: “No quiero entrar en eso. Solo pido que cumpla. Esa plata es para sus hijas, no me compro carteras ni me voy de viaje con eso. Son los derechos de las niñas”.

La situación, que ya trascendió el ámbito íntimo y familiar, ahora queda en manos de la Justicia. Mientras tanto, el cruce mediático sigue generando controversia. “Solo quiero criar a mis hijas en paz, como me criaron a mí. Nada más”, concluyó Daniela entre lágrimas.