Diego Maradona no podía siquiera reconocerse en sus propias fotos ni recordaba su nombre poco antes de morir, según el relato de Gianinna Maradona a Fernando Burlando, que lo admitió en Mujeres argentinas.
El abogado explicó la presencia de la hija menor de Claudia Villafañe en el juicio por la muerte de Maradona porque “Gianinna viene a aclararnos cómo fue la vida de Diego, cómo fue la vida y una línea en lo que respecta a su salud, desde hace mucho tiempo hasta los últimos días”.
“Quien primero detectó la voz robótica de Diego no fueron los médicos, fue Gianinna. El edema obviamente lo constató”, agregó Fernando.
Burlando destacó “todos los que fueron familiares, como Verónica Ojeda, como Gianinna, excepto los médicos que no sabemos realmente en qué pensaban ni dónde estaban, y el cuerpo de salud, e incluyo también a enfermeros y enfermeras. Todo esto era muy notorio, era muy visible. Entonces, creo que es importantísimo lo que puede aportar Gianinna de su historia, de cómo reaccionaba su psiquis frente a la medicación psiquiátrica que le daban”.
DIEGO MARADONA NO RECONOCÍA SU NOMBRE NI SUS PROPIAS FOTOS POCO ANTES DE MORIR
“Diego era una persona que por momentos estaba fantástica, le daban medicación y se olvidaba incluso de su propio nombre o su propia imagen”, reveló el abogado.
Fernando profundizó al pedir “cuento una anécdota de Giani, que el día del cumpleaños cae precisamente con su hijo y tenía la imagen de Diego abrazando a Caniggia en el Mundial, en el anteúltimo Mundial que jugó Diego, y no reconoció la imagen”.
“Y eso es lo que destructivamente hacía el tratamiento que le imprimían a Diego Armando Maradona”, explicó Burlando.
El abogado aclaró que “yo veo el dolo eventual desde el principio, desde la instrucción. Veo de parte de Luque, de Díaz y de Kosachov la representación de la muerte en Diego”.
“Varias veces en los distintos chats precisamente se hacen afirmaciones con este contenido donde dicen, por ejemplo y disculpenme la expresión que sea tan salvaje como ellos, ‘el gordo se va a morir’, ‘si sigue así, el gordo se muere’”, cerró Fernando.