Cristina Fernández de Kirchner podría perder por disposición de la Justicia la custodia de su amigo Diego Carbone, su jefe de seguridad desde hace más de una década, según anunciaron en Mujeres argentinas.
Liliana Franco contó detalles del rol que cumple el custodio de la expresidenta y la cercana relación personal entre ellos que preocupa a los jueces.
LEER MÁS: Así es por dentro el departamento en el que Cristina Kirchner pidió cumplir su condena
La panelista analizó las medidas a cumplir por Fernández de Kirchner y explicó que “por supuesto tiene que permanecer en el domicilio, no puede hacer grandes reuniones”.
“Es más, solo va a tener que notificar el personal que la va a asistir, abogado, como dijimos antes, personal médico, el personal de seguridad”, enumeró Liliana.
QUIÉN ES EL MISTERIOSO CUSTODIO DE CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER QUE ESTARÍA EN LA MIRA DE LA JUSTICIA POR LA RELACIÓN PERSONAL ENTRE ELLOS
Franco llamó la atención que “acá hay un tema, porque ella tiene hace muchísimos años su custodio, que era de la Casa Rosada, y luego ella cuando deja la presidencia él pasa a trabajar con ella y la custodia por ahora el juez Gorini no estableció que no sea Carbone que es el que está con ella hace tantos años”.

“Por qué es tan importante para ella Carbone”, quiso saber Belén Ludueña.
La panelista detalló el vínculo personal entre Fernández de Kirchner y su jefe de seguridad “porque es más allá de su custodio, es una amistad, es una persona que está siempre al lado de ella”.
“Te digo que hace fácil más de 10 años que está con ella y por lo tanto muchos especulaban que podía llegar a ser cambiado, pero eso también depende de penitenciaría. Algunos sostienen que no se lo van a cambiar, porque ya conoce los movimientos, y otros dicen ‘no, no corresponde, porque la conoce mucho, es su jefa’”, reveló Liliana.
Franco aclaró que “vamos a ver, y además tiene que ver con la custodia por la protección. Recordemos que ella ahora es una presa, que está en su domicilio, pero por lo tanto tiene los derechos y obligaciones de un presidiario. Suena fuerte decirlo, porque estamos hablando de una expresidenta, pero esa es la situación actual de Cristina Fernández de Kirchner.”
“Por lo tanto, por ejemplo, su círculo familiar va a poder asistir. Pero un punto muy importante que dice el juez es que, y lo voy a repetir porque esto es importante, ¡abstenerse de comportamientos que puedan perturbar la tranquilidad del vecindario y alterar la convivencia pacífica entre sus habitantes’”, profundizó la panelista.
Liliana insistió en que “si la casa de Cristina se convierte en un búnker donde va todo el mundo, indudablemente no encuadra en lo que pide el juez. Y la propia Cristina va a estar interesada en que no haya mucho lío porque la prisión domiciliaria puede ser revocada. Y en ese caso iría a una cárcel común”.
“A ver, Mariano, ¿me podés explicar eso que estaba justamente diciendo Lili? Puede ser revocada”, le dio el pie la conductora al doctor Lizardo.
El abogado aseguró que “puede ser revocada, dejame dar un dato de color. Hoy en el sistema penitenciario federal no hay ninguna mujer de 70 años, ninguna, para que lo tengamos en cuenta. Hay mujeres de 60 pero de 70 no hay una sola interna en todo el servicio penitenciario del Ministerio Federal”.
“Cuando evaluamos la decisión del juez en otorgarle la prisión domiciliaria con un sistema de monitoreo, estamos de acuerdo a lo que surge en la totalidad de la población común carcelaria femenina. El término perturbar es un término muy amplio porque da a muchísimas interpretaciones o sea puede salir al balcón a tomar aire, pero no a dar un discurso”, cerró Lizardo.
