Un caso de violencia de género conmocionó a la localidad de Moreno: un profesor de judo golpeó a su pareja hasta dejarla inconsciente. Después de la agresión, la bañó, mandó mensajes desde su celular y le robó maquinaria de trabajo y ahorros.
En diálogo con Mujeres argentinas habló Alán, el hijo de Roxana, la víctima. Tras contar que la mujer se recupera favorablemente y que está en observación en el hospital “por si pasa algo”, dio detalles escalofriantes del hecho.
El adolescente puso el foco en que su mamá estaba alejada de la familia desde que convivía con Cristian Videla: “Ellos estaban en una casa en La Reja, en un barrio lejano. Como él no se llevaba bien con nadie, ella dejó de tener contacto permanente con nosotros”.
Además, contó cómo se desató el infierno para su madre: “Ni bien llegó a casa, él le revoleó una tele de 43 pulgadas que la dejó en el piso. Se puso como loco. Mi mamá cayó al piso y le empezó a pegar. Me dijo que solo se acuerda de dos golpes. Quedó inconsciente y él le siguió pegando hasta que se cansó”.
“Mi mamá es pastelera, así que tiene varias maquinarias para trabajar. Él empezó a cargar el auto para robarlas. También dijo que le comenzó a preguntar dónde tenía la plata, porque ella tiene ahorros. De vez en cuando mi mamá se despertaba y lo escuchaba revolver todo o hablarle”, sumó Alán.
Además, el joven explicó que el episodio duró hasta las 10 de la mañana porque Cristian no podía arrancar el auto para irse. En todo ese tiempo, Roxana estuvo tirada inconsciente y totalmente golpeada.
Así fue la agresión: él la abandonó con la moto y luego tuvo un ataque de celos
Fue Pampa Mónaco el que dio detalles del caso: “Ella estaba en pareja hace ocho años pero hace seis meses que vivía con Cristian. Roxana estaba con él en la moto cuando ella hizo un comentario sobre la alta velocidad a la que circulaban. Él se enojó, se bajó de la moto y la dejó abandonada cerca del hospital de Moreno. No tenía cómo volverse para la casa”.
“Un joven que vio la situación se ofreció a llevarla, y es en la casa donde se desató el calvario. Cristian inventó que ella había venido con ese hombre porque ya tenían una historia. Y así, sin más, empezó a golpearla. Él es profesor de judo: sabe dónde golpear y cómo”, aseguró el periodista.

Mónaco reveló que, después de la agresión, Videla tuvo una acción particular: bañó a Roxana y comenzó a mandarle mensajes a sus familiares y compañeros de trabajo para disimular. “Él quería matarla. Se fue de la casa y la dejó agonizando, tirada. Se salvó de milagro por un compañero de trabajo que, al ver el mensaje extraño que mandó, se acercó al lugar y la encontró en ese estado”, sumó.