Cada principio de año, el comité “Deathlist” (Lista de muerte), fundado en los Estados Unidos, anticipa qué famosos de todo el mundo tienen altas chances de fallecer antes del 31 de diciembre de 2024.
Hace ya 40 años que la “Deathlist” se publica regularmente con las 50 celebrities con mayores posibilidades de “mudarse de barrio”, tal como llama al hecho de morirse el escritor Jorge Fernández Díaz.
El año pasado no fue una cosecha relevante para esta particular clasificación, ya que de 50 candidatos, solo acertaron 19, entre ellos el exfuncionario Henry Kissinger, la cantante Tina Turner y el exfutbolista Bobby Charlton.
En la “Deathlist 2024″ hay dos argentinos que merecen estar en la macabra lista, de acuerdo con las tres reglas que se aplican para confeccionarla: que el famoso sea suficientemente conocido en todo el mundo para que su fallecimiento sea publicado en medios de todo el mundo, que los candidatos no estén demasiado enfermos, y que solo 25 de los 50 nombres pueden provenir de la lista del año anterior.
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El ranking de los candidatos a morir
Entre los candidatos a morirse este año, hay un ranking de acuerdo con las probabilidades asignadas a cada uno. En primer lugar figura el expresidente estadounidense Jimmy Carter, quien tiene 100 años.
Y, en el quinto lugar, se encuentra el Papa Francisco, quien tiene 88 años y se viene quejando de sus problemas de salud.
Otro candidato a morir en los próximos meses es el comediante y productor Mel Brooks, que tiene 98 años, o los actores Clint Eastwood y Gene Hackman, ambos de 94. Y, en el puesto 34 aparece otro argentino de nacimiento: el director musical Daniel Barenboim, de 82.
En cambio, en los primeros días del año la lista ya acertó con uno de sus 50 candidatos: el exfutbolista y director técnico alemán Franz Beckenbauer, que murió a los 79 años.
