Jorgelina Cardoso, la esposa de Ángel Di María, decidió volver a tratar el tema de las amenazas recibidas por su familia en la puerta del country de Rosario. Es que el futbolista había publicado un mensaje pidiendo que pararan los homicidios de inocentes en su ciudad natal, víctimas de la guerra del narco contra el Gobierno provincial.
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Y, en un video que compartió en las redes, la esposa del delantero de la Selección Argentina insistió con su “derecho a vivir en paz”, mostrando la tranquilidad de su vida familiar en Portugal, donde reside junto a Angelito, jugador del Benfica, de la ciudad de Lisboa.
Si bien fueron detenidos los responsables de las amenazas al barrio privado Miraflores, en la localidad de Funes, vecina a Rosario, la pareja no está tranquila desde que se disparó el rumor de que Di María estaría evaluando la posibilidad de regresar a jugar en Rosario Central, el club donde inició su brillante carrera deportiva.
En las imágenes publicadas por Jorgelina se puede ver a Mía, la hija mayor del matrimonio, circulando en monopatín por la calle, a varios metros de distancia de su mamá. Por eso, Jorgelina escribió en sobreimpreso “El derecho de vivir en paz”.
El conmovedor pedido de paz de Ángel Di María
Ángel Di María no se olvida de sus orígenes, y mucho menos en momentos en que Rosario, su ciudad natal, está atravesando la peor crisis de inseguridad tras los asesinatos de cuatro personas por el narco, dos taxistas, un colectivero y un playero, para generar un clima de terror en sus habitantes. Por eso, el futbolista compartió una impactante foto por la ola de homicidios, a pesar de estar viviendo en Europa.
Pero Fideo, al igual que Lionel Messi, se siente totalmente rosarino, por más que se fuera a vivir al extranjero cuando todavía era muy joven. Y, como pasa con Leo, Di María regresa todos los fines de año con su esposa y sus hijas a pasar las Fiestas a Rosario con sus familiares y amigos más cercanos.
Desde ese vínculo sentimental tan fuerte con la realidad de su ciudad, donde hizo su carrera profesional en Rosario Central, es que el delantero de la Selección Argentina se involucró personalmente en la virtual “guerra” que los gobiernos nacional, provincial y municipal libran contra las bandas de narcotraficantes que asolan la región.
