Sinónimo de justicia y valentía, El Zorro ha dejado, sin lugar a dudas, una huella imborrable en el mundo, especialmente en Argentina gracias al actor estadounidense Guy Williams y su afamada interpretación.
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Si bien El Zorro se ha conocido mundialmente gracias a sus diferentes interpretaciones en televisión y cine, el personaje fue creado en 1919 por Johnston McCulley, un periodista, guionista y escritor. Es considerado uno de los primeros héroes de ficción de la cultura moderna.
El Zorro es la identidad secreta de Don Diego de la Vega, un aristócrata que vivía en Los Ángeles durante la era mexicana aunque algunas adaptaciones de la historia lo han ubicado durante la época del virreinato por ser las historias más acordes a la era del dominio español.
Quién fue El Zorro en la vida real
Si bien Diego de la Vega no fue un personaje real, se cree que Johnston McCulley se inspiró en algunos bandidos reales de California. Algunos de estos fueron, por ejemplo, la leyenda mexicana Joaquín Murrieta, cuya vida fue contada en la película “La máscara del Zorro”.
Otras posibles inspiraciones serían Robin Hood, el indio yokut Estanislao o la historia de Guillén de Lampart, un soldado irlandés que vivió en México en el siglo XVII. Su vida inspiró la novela “Memorias de un impostor, don Guillén de Lampart, rey de México” de Vicente Riva Palacio.
“Durante años se pensó que Joaquín Murrieta y Salomón Pico fueron las inspiraciones para el Zorro”, cuenta el investigador cinematográfico Adrian Escudero Tanús. “Eso solamente se conjeturó, dado que Johnston McCulley jamás lo reveló. Pero en realidad, su gran inspiración fue Guillén de Lampart”, agregó.
Según el investigador, Guillén de Lampart fue un precursor de la independencia de México. Se apodaba el Zorro y usaba una máscara, proponiéndose liberar a indios, negros y mestizos en el Nuevo Mundo. Además, firmaba dejando una Z marcada.
Si bien Lampart fue borrado de la historia de México, sus sucesores recrearon la historia y por ello fue olvidado en el país azteca, “pero no en Estados Unidos donde seguramente McCulley la conocía muy bien”, según Adrián Escudero Tanús.
