Una nena de 7 años murió en pasado domingo tras caerse de un toro mecánico en un salón infantil en Venado Tuerto. Según testigos, la niña golpeó su cabeza contra “algo duro”, lo que le provocó la muerte casi al instante. Le pequeña fue trasladada por sus familiares al Hospital Gutiérrez, donde “ingresó a la guardia sin signos vitales”. “Aparentemente, un traumatismo craneoencefálico”, indicó el parte médico.
“El comercio estaba autorizado por parte de la municipalidad y estaban todas las protecciones que tienen que ver con la atracción funcionando”, confirmó el fiscal que entiende en la causa, Damián Casullo, quien aclaró que aún resta investigar si las instalaciones tenían la habilitación correspondiente. “Eso es jurisdicción del área administrativa de la municipalidad”, agregó el funcionario, quien sostuvo que se están llevando las pericias correspondientes.
Aunque trascendió primero que la víctima se había golpeado contra el suelo en un lugar sin protección, el fiscal aclaró que “debajo del toro había una protección inflable, justamente para amortiguar las caídas”. Casullo también descartó que la menor haya golpeado contra una pared, versión que había circulado en un primer momento.
Imputaron al dueño del pelotero de Venado Tuerto
En medio de la conmoción por la muerte de la niña, y mientras se espera el resultado de las pericias, la Justicia de Santa Fe imputó tanto al dueño del pelotero como al operador del toro mecánico por del delito de homicidio culposo, aunque no descarta agravar la acusación.
Además, el Tribunal Municipal de Faltas ordenó la clausura provisoria del local “Big Party”, ubicado sobre la calle Moreno al 1100 de la ciudad santafecina de Venado Tuerto, el establecimiento donde tuvo lugar el trágico hecho.
