Un estremecedor caso mantuvo en vilo a la localidad de San Martín en las últimas horas: un joven confesó haber matado a su abuela pero antes intentó desviar la causa a través de un estremecedor pedido en redes sociales.
Lucas Pedraza le dijo el 2 de septiembre pasado que llevaba más de 15 días sin ver a su abuela, Estrella Domínguez Fernández. En redes, el joven participó activamente de la búsqueda que intentaba dar con el paradero de la mujer, una jubilada de origen español de 75 años.
En las últimas horas, lo que inició siendo una causa por desaparición pasó a ser una investigación en donde el nieto confesó el crimen. En su perfil oficial, antes de eso, viralizó una fotografía de la abuela con el texto “por favor, ayúdenme a difundir, buscamos a mi abuela”.
El asesinato de la abuela
Los investigadores llegaron a la conclusión de que la jubilada había discutido con Lucas “y desde entonces no tuvieron más noticias de ella”. Pedraza confirmó la pelea pero después manifestó que la mujer se había ido de su casa llevándose el pasaporte. Aseguró que “se había ido para España”.
El vago testimonio no convenció a las autoridades, que allanaron la casa familiar en San Martín. Allí enontraron el cuerpo de Estrella en la terraza de la propiedad. Los detalles sorprendieron por ser macabros: estaba en el interior de un tambor de 200 litros y cubierto de una mezcla de tierra, cal y cemento.
Así, Lucas Pedraza confesó el crimen, quebró en llanto y fue detenido por la policía. Un carnicero amigo de la víctima también fue demorado por las autoridades.
