La Selección Argentina se enfrentó frente a Paraguay por una nueva fecha de Eliminatorias y no pudo derrotar a su rival. El equipo de Lionel Scaloni cayó por 2 a 1 y Lionel Messi se mostró muy enojado durante el encuentro. Una vez finalizado el partido, el 10 no pudo disimular su malestar y tomó una determinante decisión, que causó sorpresa entre los periodistas.
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El seleccionado no tuvo un buen rendimiento como visitante y ese mal desempeño generó molestias en todo el equipo pero principalmente en Messi. El delantero se mostró muy enojado por el arbitraje del brasileño Anderson Daronco y la actuación del equipo tampoco ayudó, por lo que el futbolista se fue fastidiado de la cancha.
Además, durante el partido, el esposo de Antonela Roccuzzo fue incomodado por la defensa del equipo de Paraguay. En varias ocasiones tuvo que retroceder para poder conseguir la pelota de sus compañeros, pero se le terminaban complicando las jugadas porque le quedaba mucho campo de juego por recorrer.
La polémica actitud de Lionel Messi, en medio de su enojo por el partido de la Selección
En una noche para el olvido, el futbolista tomó una determinante decisión, tras salir del estadio: a pesar de que los periodistas aguardaban por su palabra, no quiso dar declaraciones y en su lugar, quedó Rodrigo de Paul hablando con la prensa. Muy molesto, se subió directamente al micro.
“Creo que intentamos, pero Paraguay ganó bien, hizo su juego, lo que plantearon les salió bien. Creo que hicimos un buen partido en líneas generales”, manifestó de Paul, en diálogo con los periodistas presentes.
“Da bronca perder, pero también vinimos a una cancha difícil, Paraguay es un gran rival, pero ya está. Hay que levantarse. Cada derrota que sufrimos nos hizo bien, el equipo ganó cosas, hay que corregir errores y seguir. Los goles han sido virtud de Paraguay”, reconoció el futbolista, que también se mostró molesto por la derrota.
