Las prepagas aplicarán un nuevo aumento en sus cuotas durante diciembre, alcanzando hasta un 4,9%. Este ajuste marca el sexto aumento consecutivo desde que el Gobierno de Javier Milei implementó la desregulación del sector, lo que generó un fuerte impacto en el bolsillo de los usuarios y en el acceso a los servicios de salud.
El aumento de diciembre no solo preocupa por ser el último de un año marcado por constantes ajustes, sino también porque se ubica por encima de la inflación de octubre, que fue del 2,7%, según el INDEC. Las cuotas mínimas tendrán un alza del 3,5%, y el techo de este aumento alcanzará el 4,9%, afectando a miles de familias que deben afrontar este nuevo costo en plena temporada de fiestas.
El comunicado oficial ya fue enviado por las prepagas a sus afiliados, quienes comienzan a recibir los detalles del ajuste en sus correos electrónicos.
Más de un 120% de aumento acumulado en 2024
A lo largo de los once meses de 2024, las cuotas de las prepagas acumulan un incremento total del 121%, impactando directamente en los presupuestos familiares. Este ajuste se suma a otras medidas que han complicado aún más el acceso a los servicios de salud, como la limitación en la emisión de recetas y órdenes médicas.
Con la reciente normativa que acompaña la desregulación del sector, los afiliados a planes cerrados solo podrán obtener recetas y órdenes médicas emitidas por profesionales incluidos en las cartillas de sus prepagas. Esto significa que quienes deseen mantener la cobertura de recetas y órdenes privadas deberán optar por planes abiertos, que son significativamente más costosos.
¿Qué implica la desregulación de las prepagas para los usuarios?
La desregulación del sistema de prepagas, implementada en julio de 2024, abrió la puerta a que las empresas de salud ajustaran sus tarifas sin limitaciones establecidas previamente. Desde entonces, los incrementos han sido constantes, generando preocupación entre los afiliados por el encarecimiento de un servicio esencial como es la salud.
Con este último aumento del año, los usuarios se enfrentan a un panorama incierto para 2025. La combinación de subas acumulativas, restricciones en las coberturas y la necesidad de optar por planes más caros pone en jaque la accesibilidad a servicios de salud privados en Argentina.
