Para hacer frente al creciente uso de celulares en preadolescentes, el psicólogo Alexis Alderete (MN 85367) recomienda establecer límites claros y promover el diálogo. En diálogo exclusivo con este medio, explicó que el uso excesivo de estos dispositivos, especialmente en eventos como los viajes de egresados, puede generar problemas como la falta de concentración y de memoria.
“En el viaje de egresados es importante comunicarles con anticipación cómo será el uso del celular, si no usarán el celular o si lo van a hacer durante horas permitidas, como después de las excursiones o de las salidas a los boliches. [...] No usar el celular permite que se puedan relajar, que el sistema nervioso esté más tranquilo y que no estén constantemente estimulados”, explicó.
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Y agregó que “les va a permitir estar conectados con la naturaleza, con los juegos. Además abrirse y conectarse emocionalmente. Y también saber participar plenamente de lo que está sucediendo. Dejando el famosos multitasking de lado. Esto va a permitir que los chicos tengas recuerdos vívidos. Además que aprendan a desarrollar la tolerancia al malestar, de no estar conectados, de no saber qué está pasando con los padres y la familia”.
“Cuando los chicos tienen una rutina cotidiana de verificar el celular a penas se despiertan, cuando están muchas horas conectados, tienen miedo de perderse esa actividad. Cuando va al viaje de egresados aparecen reacciones de miedo, desesperación u enojo para volver a ese hábito cotidiano. Porque tienen una adicción sin sustancias o adicción conductual. Tienen que estar conectados para liberar dopamina, que los hace eliminar el malestar de su vida familiar o educacional”.
Según explica Alderete, la clave para manejar las emociones fuertes es permitir que afloren de manera natural y validarlas. Sugiere observar sin juzgar, permitiendo que la persona exprese libremente lo que siente. Una vez que la emoción haya pasado, es el momento de negociar y buscar entendimiento. Sin embargo, cuando la emoción es muy intensa, el especialista propone técnicas como mojar la cara o tomar una ducha fría para desactivar el sistema nervioso y calmar al preadolescente.
Cómo afecta el uso del celular en la escuela
Alexis Alderete no solo habló del uso del celular en el viaje de egresados, sino que también profundizó en los efectos del uso excesivo del celular en el ámbito escolar. Destacó cómo puede afectar la concentración, la interacción y las habilidades sociales.
“A nivel mundial se está impidiendo que los alumnos ingresen con el celular al aula. Tiene como beneficios que el alumno pueda prestar completa atención a lo que está diciendo el profesor. Entonces permite que pueda participar plenamente de esa interacción. Hay que volver a viejas prácticas en las que se participaba plenamente de lo que se iba interactuando en la escuela, dando actividades lúdicas o restringiendo el uso del celular en el recreo y en otros momentos. [...] Los chicos hacen multitasking y pierden concentración y memoria”, indicó.
Además dijo que “hay que hacer una charla responsable para informar que van a tener el celular en ciertos ámbitos y en ciertos horarios. Para no interrumpir el conocimiento, el aprendizaje y el buen desarrollo de habilidades sociales. La escuela es el primer ámbito en donde el chico se va desarrollando, el celular ha retrasado las habilidades sociales de interacción. Por eso hay muchos chicos con timidez y con ansiedad a abordar una charla con un par. Entonces se van desarrollando conductas dañinas como soportar bullying para ser aceptado dentro del grupo”.
“Impide la interacción cara a cara o el desarrollo de las habilidades sociales que es tan importante en los preadolescentes. Impide la expresión de las emociones, de lo que van atravesando y la participación en diferentes roles. Porque el celular hace que uno se vaya aislando, que lo importante sea lo que pasa en ese aparatito. También lleva a potenciar conflictos”, explicó.
Según el especialista, la problemática del uso excesivo de celulares en preadolescentes requiere una acción conjunta de padres y escuela. En lugar de prohibiciones estrictas en el colegio, es importante que los padres moderen el uso de dispositivos en el hogar, fomentando actividades como la lectura y el deporte. Además destaca que los niños aprenden por observación, por lo que la conducta de los padres es fundamental. No basta con exigir medidas en la escuela si en casa los adultos también están constantemente conectados.
