Silvina Escudero no está atravesando su mejor momento. Luego de ser ingresada en una clínica médica, la bailarina se sinceró en sus redes sociales sobre el difícil momento que atraviesa y dejó una profunda reflexión en sus redes sociales.
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El periodista Fede Flowers había contado que la actriz había tenido que ir a la guardia, tras experimentar un cuadro preocupante: estaba descompuesta, con mareos y muy nerviosa. Luego de practicarle algunos estudios, los médicos coincidieron que estaba siendo afectada por una fuerte contractura muscular.
Tras regresar a su hogar, Silvina compartió un profundo mensaje sobre lo ocurrido y llevó tranquilidad a sus seguidores. “Fue una noche difícil. Dormí como pude. Creo que tengo tres horas de sueño encima, pero estoy bien y les agradezco todos sus mensajes”, expresó en su cuenta de Instagram, mientras estaba acompañada por una de sus mascotas.
Qué dijo Silvina Escudero sobre su estado de salud
“Venimos de una semanita difícil, de un año difícil. Muchas cosas las saben, otras no. Podría contarles para empaquetar el año y decirles: ‘Besote, chau’”, continuó la bailarina sobre las cosas que le han sucedido.
“Igual aferrándonos a lo positivo y al agradecimiento. Y sí, un mal año, pero acá estamos”, dijo Silvina a modo de reflexión final.
“Fui al médico y acabo de llegar a casa. No estuve internada, fui a la guardia de un hospital por un montón de sintomatología que tenía por mis problemas de columna, de hace décadas, por ser bailarina. Vivimos con dolores y a veces son insoportables. Pero no estuve internada. Estoy un poco mejor”, aclaró Escudero, luego de ver las noticias sobre su estado de salud.
“En julio me diagnosticaron algo y me tenían que hacer una cirugía. Me tenían que abrir el pecho para sacarme algo malo que me habían encontrado. Fui sola al médico y me dieron una noticia tremenda”, detalló la actriz sobre otra de las malas noticias que recibió durante este año.
“Estuvimos dos meses creyendo que me tenía que hacer una cirugía a corazón abierto, pero en septiembre llegaron unos estudios de sangre y gracias a Dios terminó siendo algo que cada año se puede ir chequeando con tomografías”, reconoció.
“Esta fue otra de las cosas que me pasó este año. Eso fue mucho estrés. En fin, es la vida. A cada uno le toca vivir la vida que le toca vivir. El tema es qué hacemos con eso”, cerró Silvina.
