En esta remota localidad, su pequeño tamaño y su clima extremo hacen que todos sus habitantes vivan dentro de un único edificio, que además cuenta con su oficina de correos, su comisaría de policía, su iglesia, su lavandería y su supermercado propios.
Esta torre se encuentra en Whittier, en el Estado de Alaska (noroeste de Estados Unidos), a unos 100 kilómetros de la capital estatal, Anchorage. Allí, en la “Torre del Desierto”, tal como se la conoce localmente, todos y cada uno de sus 263 habitantes tienen al condominio Begich Towers como su hogar.
En una región donde las temperaturas mínimas pueden alcanzar los 40 grados bajo cero tranquilamente, con picos de -70°C, vivir todos juntos se convierte en una necesidad, sobre todo en medio de los inviernos rigurosos, donde el frío, la nieve y el hielo se vuelven un riesgo para todos.
A la noche en invierno, el edificio queda completamente aislado del resto del mundo, ya que el túnel de 4 kilómetros que sirve como única vía de acceso cuando la nieve lo tapa todo, permanece cerrado. Pero los habitantes de la torre no se preocupan, porque tienen todo lo que necesitan para pasar los días más fríos encerrados, incluido un parque de juegos para los más chicos.
Una sensación única
Las Begich Towers fueron construidas durante la Guerra Fría, cuando los militares estadounidenses las hicieron para alojar a los soldados y usarlas como cuartel, en la época en que la hipótesis de conflicto con la Unión Soviética era real (Rusia se encuentra a menos de 100 kilómetros del extremo oeste de Alaska). Pero cuando el Ejército se fue, el edificio pasó a ser administrado por la compañía ferroviaria Alaska Railroad.
“Descubrí la ciudad más extraña de Alaska. Esta es Whittier, una ciudad donde la población vive bajo un mismo techo. No solo eso, ni siquiera tienen que irse. Ahora Whittier está atrapada entre el agua y las escarpadas montañas, y la única forma de llegar es a través de un túnel de un solo sentido de 4 kilómetros que se cierra por la noche. Literalmente, podrías quedarte atrapado aquí”, escribió una turista en las redes tras visitar la localidad.
