El viernes 24 de enero tendrá lugar el primer matrimonio igualitario en una cárcel en Entre Ríos. Gustavo Saavedra y Daian Castro, dos abusadores condenados a 20 años de prisión, darán el “sí, quiero” en el penal.
Los convictos están en pareja desde hace 14 años, tiempo antes de ser condenados por el abuso sexual de tres hermanitos desde que estos tenían entre 4 y 6 años.
Ahora, solicitaron a la Justicia la posibilidad de casarse bajo la ley del Matrimonio Igualitario y su pedido se concedió. El prefecto Carlos Palacio, director de la Unidad Penal N°1 “Juan José O’Connor”, exlicó a medios locales que los hombres “se encuentran alojados en el pabellón que alberga a los internos vinculados a delitos de integridad sexual y violencia de género”.
“La convivencia es buena con los otros internos, allí permanecerán más allá de la legalización del vínculo. En el pabellón 23 conviven 109 internos, en el cual está distribuido en celdas de seis personas cada una, con espacios comunes”, señaló.
En la invitación a la boda que la pareja le hizo llegar a los allegados se lee: “Gustavo & Daian. No sólo la verdad, sino el amor también nos hará libres. Las flores más hermosas nacen del lodo, por eso no dejamos morir nuestros sueños en el olvido y, aunque el momento sea imperfecto, hagamos que la perfección del Amor simplemente suceda, transformando el dolor en fuerza”.
Los abusos cometidos
En el año 2013, el padre de las víctimas, tres hermanitos, abrió una investigación que involucraba a la mamá de los menores, una tía, un tío y el abuelo materno, una vecina, un expolicía e incluso un locutor de Gualeguaychú.
A la madre se la acusó, y se pudo probar en el juicio, de haber llevado a cabo diversas conductas que alteraron el normal desarrollo sexual, tanto psíquico como fisiológico. Esas “preparaciones” consistían en abusos sexuales de ella a sus hijos, dos nenas y un varón, con 5, 6 o 7 años de edad, informó TN.
La madre obligó a los chicos a participar de orgías entre adultos, al principio como “observadores” pero luego ya explotándolos. Estas fiestas tenían lugar en Oro Verde, a 10 kilómetros de Paraná.
