Los posibles riesgos de las ondas electromagnéticas emitidas por dispositivos cotidianos como los celulares y las redes WiFi son una realidad. De acuerdo a una nueva investigación científica, realizada por el Instituto Politécnico Nacional (IPN), los efectos de estas frecuencias podrían tener consecuencias a largo plazo.
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Los científicos hicieron pruebas en más de 300 ratones y revelaron resultados que podrían tener implicancias preocupantes para la salud humana. El estudio sometió a los roedores a campos electromagnéticos similares a los que emiten los celulares y los módems WiFi. Se utilizaron dos frecuencias específicas: 860 MHz, típicas de la tecnología 2G, y 2.5 GHz, propias de los dispositivos WiFi modernos.
Estas frecuencias, con niveles de potencia representativos del uso cotidiano, fueron aplicadas durante un período prolongado, simulando una exposición constante como la que enfrentan las personas en su vida diaria.
El objetivo principal era evaluar si estas ondas generaban cambios significativos a nivel celular y fisiológico en los organismos vivos. Los ratones fueron divididos en grupos con distintas condiciones de exposición, lo que permitió analizar los efectos de manera comparativa y detallada.
Impacto de las ondas de celulares y WiFi
Los datos recopilados evidenciaron efectos perjudiciales en los ratones expuestos a las frecuencias electromagnéticas. Entre los hallazgos más destacados se encuentran:
- Aumento del estrés oxidativo: un proceso que genera daño celular al no neutralizar adecuadamente los radicales libres. Este fenómeno está relacionado con enfermedades degenerativas, envejecimiento prematuro y deterioro general de la salud.
- Daños en la salud reproductiva: los ratones machos presentaron alteraciones en la calidad del esperma y daño testicular, lo que sugiere que la exposición podría tener efectos en la fertilidad.
- Alteraciones neuropsiquiátricas: los animales experimentaron cambios en el comportamiento, problemas de memoria y una reducción en la actividad motora, lo que apunta a posibles riesgos para la salud mental.
- Daño genético: el estudio detectó lesiones en el ADN de los ratones, que podrían predisponer al desarrollo de enfermedades graves, como el cáncer. En algunos casos, estas lesiones provocaron incluso la muerte celular en tejidos clave.
¿Qué dice la comunidad científica?
Aunque el experimento se realizó en ratones y no en humanos, sus resultados generan inquietud en el ámbito científico. Si bien organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han señalado previamente que la exposición prolongada a campos electromagnéticos podría estar vinculada al desarrollo de ciertos tipos de cáncer, el debate sobre los verdaderos efectos de estas ondas sigue abierto.
Por ahora, los especialistas insisten en la necesidad de realizar estudios adicionales para confirmar si estos hallazgos se replican en humanos y, de ser así, cómo podrían mitigarse los riesgos asociados a la exposición constante a dispositivos electrónicos.
