Un brutal caso de parricidio sacudió a la comuna de La Pintana, en Santiago de Chile, luego de que una mujer fuera acusada de desconectar las máquinas de asistencia vital de su hijo cuadripléjico, causándole la muerte. Un testigo presenció el momento en que la madre, Sonia del Carmen Paillao Calfucura, retiró el tubo de oxígeno del joven de 28 años, Marco Antonio Cantillana Paillao, y aunque intentó intervenir, ella se lo impidió violentamente.
Según la declaración del vecino testigo, Sonia fue vista aquella noche caminando por la calle junto a un hombre desconocido, en evidente estado de angustia. Al acercarse para preguntarle qué le pasaba, ella le confesó su fatiga y frustración por el cuidado de su hijo, quien había quedado cuadripléjico tras un tiroteo en 2018, el día de su cumpleaños.
“Estoy cansada, no doy más. No soy capaz de seguir cuidándolo, quiero que descanse. Estoy aburrida de cuidarlo porque no puedo hacer mi vida tranquila”, fueron las palabras que el testigo escuchó antes de que la mujer tomara la decisión fatal.
Al ingresar a su vivienda, Sonia se acercó a su hijo, le dio un beso en la frente y se recostó sobre su pecho llorando, un acto que quedó grabado en la memoria del testigo que observaba desde la vereda. Minutos después, comenzó a manipular las máquinas que lo mantenían con vida, lo que activó una alarma médica que ignoró por completo.
Al notar que la manguera del oxígeno estaba desconectada y que Marco convulsionaba, el vecino intentó entrar a la casa para ayudarlo, pero Sonia lo detuvo con violencia. “Me agarró de la polera, me sacó de la casa y me dio un golpe en la espalda diciéndome: no entres”, relató el testigo.
Un desesperado intento de ayuda que llegó demasiado tarde
El vecino buscó asistencia entre los residentes del barrio, pero cuando llegaron los agentes de seguridad y el personal médico, ya era demasiado tarde. Treinta minutos después, confirmaron la muerte de Marco, quien pasó sus últimos minutos sin la posibilidad de defenderse ni recibir ayuda.
Prisión preventiva y acusación por parricidio
Tras su arresto, Sonia del Carmen Paillao fue acusada de parricidio por la Fiscalía Metropolitana Sur. Según el Código Penal de Chile, este delito se aplica cuando una persona asesina a su cónyuge, padre, madre, abuelos o hijos.
El tribunal dictó prisión preventiva por 180 días, mientras se lleva a cabo la investigación. La comunidad sigue impactada por un caso que ha generado un profundo debate sobre la carga emocional y psicológica de los cuidadores y los límites de la desesperación en situaciones extremas.
