Las frutas son un pilar fundamental de la alimentación saludable, pero no todas reciben el mismo reconocimiento. Mientras que la manzana, la banana y la naranja dominan las mesas argentinas, hay una fruta con un perfil nutricional inigualable que sigue siendo subestimada en el país: el kiwi.
El kiwi es considerado por muchos especialistas en nutrición como la fruta más saludable del mundo. Su composición lo convierte en un verdadero superalimento, gracias a su aporte de vitaminas, minerales y antioxidantes esenciales para el bienestar.
Algunas de sus propiedades más destacadas incluyen:
- Doble cantidad de vitamina C que la naranja, fortaleciendo el sistema inmunológico y reduciendo el estrés oxidativo.
- Alto contenido de fibra, ideal para mejorar la digestión y prevenir el estreñimiento.
- Rico en luteína, un poderoso antioxidante que protege el corazón, la visión y ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer.
- Fuente de minerales esenciales, como cobre y magnesio, claves para el desarrollo cerebral y la salud muscular.
- Efecto antiinflamatorio y antioxidante, que contribuye a reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
- Mejora la piel y regula la presión arterial, gracias a su contenido de vitamina E y potasio.
¿Por qué el kiwi no es tan popular en Argentina?
Si bien es fácil encontrar kiwis en supermercados y verdulerías, su presencia en la dieta de los argentinos es bastante limitada. Las razones de esta baja popularidad se basan principalmente en su precio elevado. El kilo de kiwi puede superar los $7.500, lo que lo convierte en una opción costosa en comparación con otras frutas.
Además, otro problema sobre su consumo es la falta de información sobre sus propiedades. Muchas personas desconocen su alto valor nutricional y lo consideran una fruta exótica o prescindible en la alimentación diaria. Sin embargo, su impacto en la salud podría justificar su incorporación más frecuente en la dieta, incluso en pequeñas cantidades.
Opciones para complementar la alimentación con frutas
Si bien el kiwi es una de las frutas más completas, existen otras alternativas saludables que también aportan beneficios clave:
Manzana: excelente fuente de fibra y antioxidantes.
Frutos rojos: protegen el sistema cardiovascular.
Uvas: mejoran la circulación y la salud del corazón.
Sandía: mantiene el cuerpo hidratado y es baja en calorías.
Incorporar el kiwi en la alimentación, aunque sea ocasionalmente, puede marcar una diferencia significativa en la salud. Su combinación única de nutrientes lo convierte en un aliado ideal para fortalecer el sistema inmunológico, mejorar la digestión y cuidar la piel.
