En las últimas horas trascendieron detalles del difícil momento que atraviesa María Becerra, quien fue internada por una hemorragia interna. Ahora, en medio de muchas especulaciones acerca de su salud, su familia comunicó que sufrió un nuevo embarazo ectópico.
“Con el respeto que se merece esta situación y agradeciendo profundamente el cariño que tantas personas han brindado siempre a Mari y a Juli queremos compartir un momento muy delicado que ha sucedido en las últimas horas”, indicaron en la publicación.
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Además que “María volvió a atravesar un embarazo ectópico que derivó en una hemorragia interna con riesgo de vida. Gracias a la rápida intervención de Juli, del equipo médico y del entorno que los acompaña se logró actuar a tiempo”.
“Mari salió sana y salva de la operación, con todo lo que eso implica. Luego de pasar por la terapia intensiva hoy se encuentra estable y en reposo. Este es un proceso de sanación profundo que requiere tiempo, cuidados y mucho amor. En este momento su bienestar físico emocional es la única prioridad. Sabemos que junto a Juli recorrerán este camino a su propio ritmo, con la fuerza y el amor que los une”, agregaron.
Y también que “agradecemos profundamente el respeto, la empatía y el acompañamiento. [...] Mari y Juli les agradecen de corazón el cariño, la comprensión y el res peto".
Qué es lo que tuvo María Becerra
El embarazo ectópico ocurre cuando un óvulo fertilizado se implanta fuera del útero, comúnmente en una de las trompas de Falopio. Este tipo de embarazo no puede desarrollarse con normalidad y representa un riesgo serio para la salud de la persona gestante, ya que puede causar ruptura de la trompa y hemorragias internas. Los síntomas iniciales pueden incluir dolor abdominal, sangrado vaginal anormal y mareos.
Debido a que el embarazo ectópico no es viable, requiere tratamiento médico inmediato. Dependiendo del caso, el tratamiento puede ser con medicamentos como el metotrexato para detener el crecimiento del embarazo, o mediante cirugía para remover el tejido. La detección temprana es crucial para prevenir complicaciones graves y preservar la fertilidad futura.
