Luciano Ojeda, pareja de Gladys “La Bomba Tucumana”, falleció este sábado a los 38 años luego de una larga y difícil batalla contra un cáncer agresivo. La noticia fue confirmada por su hermano, Matías Ojeda, y replicada por el periodista Facundo Ventura.
El diagnóstico llegó de manera inesperada durante un estudio médico de rutina, mientras trabajaba como licenciado en higiene y seguridad. El hallazgo de un tumor abdominal sin síntomas previos fue el inicio de un proceso doloroso, que incluyó múltiples cirugías, quimioterapia y tratamientos intensivos.
UNA HISTORIA DE AMOR Y DOLOR
Según relató la propia cantante, “a los cuatro meses le volvieron a encontrar un tumor de 8 kilos. Lo operaron tres veces y después vino la quimioterapia”. En medio del avance de la enfermedad, Luciano decidió alejarse de Gladys para evitarle sufrimiento. “Me dejó porque se iba a morir. Dijo ‘esta chica no se merece nada de lo que estoy viviendo’”, confesó conmovida la artista.

Pese a la separación, Gladys insistió en acompañarlo hasta el final. “Cuando volvió, ya estaba pelado y pesaba 45 kilos. Desde entonces, no me separé más”, recordó.
EL FINAL DE UNA BATALLA
En mayo de 2024, nuevos estudios revelaron complicaciones severas. Luciano Ojeda se encontraba en diálisis, con un solo riñón funcional, y muy debilitado. “Está cansado de sufrir, pobrecito. Pero no hay que abandonar”, había dicho Gladys, aferrándose a la esperanza.
Hasta sus últimos días, la cantante estuvo a su lado, compaginando su carrera artística con su rol como cuidadora. En redes sociales, miles de seguidores expresaron su pesar y destacaron la fortaleza con la que Gladys enfrentó esta dura etapa.