Una de las esquinas más emblemáticas de la Ciudad de Buenos Aires se prepara para un giro rotundo. La tradicional intersección de Acoyte y Rivadavia, en el corazón del barrio de Caballito, será escenario de una transformación histórica impulsada por un ambicioso plan de movilidad urbana que promete modificar el transporte porteño.
A partir de una reestructuración del tránsito anunciada por el Gobierno porteño, la calle Acoyte pasará a tener un único sentido de circulación hacia el norte. El cambio no es menor: forma parte de las obras para adaptar la zona al novedoso sistema de transporte TramBus, un híbrido entre tranvía y colectivo que promete mayor eficiencia, velocidad y sostenibilidad.
¿Qué es el TramBus y cómo impactará en Caballito?
El nuevo medio de transporte, denominado T1, será el primero de su tipo en la Ciudad y unirá la Costanera con el Centro de Trasbordo Sáenz, atravesando una extensa franja de barrios clave como Palermo, Villa Crespo, Almagro, Parque Chacabuco y Nueva Pompeya, además de Caballito.
“El TramBus será una innovadora forma de moverse por la ciudad que combina lo mejor del tranvía y el colectivo”, afirmó Pablo Bereciartua, Ministro de Infraestructura de la Ciudad, al anunciar el proyecto. Según detallaron desde el Ejecutivo, el objetivo es disminuir los tiempos de viaje y mejorar la frecuencia del transporte público, especialmente en zonas densamente pobladas.
El rediseño del cruce Acoyte y Rivadavia no es un hecho aislado. Se enmarca dentro de una serie de transformaciones más amplias que buscan modernizar el sistema de transporte porteño. Entre ellas se destacan la futura línea F de subte, pensada para conectar los barrios del sur con el centro, y la incorporación de colectivos eléctricos con el fin de reducir la huella de carbono en el tránsito urbano.
Con estas medidas, el Gobierno porteño busca aggiornar la infraestructura al ritmo de las grandes capitales del mundo, priorizando el transporte público y la experiencia del usuario.
Para los habitantes de Caballito y quienes circulan a diario por esa zona, el cambio de sentido de Acoyte significará una reorganización total en la forma de transitar y acceder al centro del barrio. Comercios, peatones, automovilistas y usuarios del transporte público deberán adaptarse a una nueva dinámica urbana.
