El tan esperado encuentro entre Mauro Icardi y sus hijas por el Día del Padre terminó en una gran decepción. Según trascendió, todo estaba preparado para que compartieran el domingo juntos, bajo un régimen de visitas ordenado por la Justicia. Sin embargo, los planes se frustraron a último momento y el conflicto familiar sumó un nuevo capítulo.
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El delantero del Galatasaray esperaba reencontrarse con sus hijas en una jornada especial, siguiendo las indicaciones legales pactadas previamente. Pero una nueva polémica —sí, nuevamente relacionada con el ya conocido Wandagate— interfirió en los planes familiares.
“No habrá encuentro del Día del Padre para Icardi. Viaje urgente a Turquía para chequeo por exigencia del Galatasaray”, escribió Laura Ubfal. Ya lo había adelantado Luis Bremer.
EL ENCUENTRO DE MAURO ICARDI Y SUS HIJAS POR EL DÍA DEL PADRE, ARRUINADO
Este nuevo capítulo vuelve a dejar en evidencia la tensa situación entre Mauro Icardi, Wanda Nara y sus respectivas familias. La relación entre el futbolista y su expareja continúa siendo conflictiva, con consecuencias directas sobre los vínculos parentales.
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Wanda Nara quedó destrozada. Así lo aseguran quienes viven el día a día con la empresaria. Hasta hace unas horas, Wanda se golpeaba el pecho y provocaba a Mauro Icardi. Parece que la historia se dio vuelta y no la vio venir: su exmarido apostó fuerte.
“Porque hoy Mauro hace cinco minutos… Acaba de llegarle a Wanda el pedido de restitución internacional, tenencia de las niñas, pasaportes y todo... Él no quiere que las chicas vuelvan a Argentina bajo ningún punto de vista. Hoy Mauro se las quiere llevar. Si hablas con el entorno de Wanda te dice que eso no va a pasar”, detalló Yanina Latorre.
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“Pero si hablas con el entorno de Mauro, te dicen que sí, que las chicas son italianas, que vivieron siempre en Europa, que tenían un colegio, que Wanda las secuestró y la mar en coche”, remarcó.
Fernanda Castelli, abogada especialista, explicó: “La realidad es que tanto Argentina como Turquía y varios países son parte de la Convención de la Haya de 1980 sobre sustracción internacional de menores. Eso obliga al Estado argentino a dar trámite a un proceso de restitución internacional. O sea, que es viable. Es viable que él lo pida”.
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“Después deberá ser una cuestión de la justicia analizar bien infinito cada una de las cuestiones de la convención, de las excepciones de la convención, de las formalidades. Pero la realidad es que como viable, es viable”, resaltó.
“Todos los actos que hagan acá de modo tal de querer arraigar el centro de vida en la República Argentina pueden llegar a sumar, pero bueno, si se comprueba que el centro de vida estaba en Turquía y el juez no entiende de esa forma, por más que las hayan escolarizado, por más que estén yendo al pediatra, por más que sea lo que sea, deberían devolver al lugar del centro de vida, que eso es lo que dice la convención”, sostuvo.
“Las nenas van a ser escuchadas. Por la convención de los derechos del niño van a ser escuchadas, obviamente. Ahora, la oposición del niño tampoco puede ser una cuestión de me gusta más acá o allá.El proceso se inicia en lo que sería la Autoridad Central de Turquía. Se manda a la Cancillería Argentina, Ministerio de Relaciones Exteriores en la Argentina, la Dirección de Asistencia Jurídica Internacional. Y de ahí a la Justicia. Se dirime en la Argentina”, argumentó.
