Cristina Kirchner comenzó este martes a cumplir su condena a seis años de prisión por la causa Vialidad y, tal como se especulaba en los últimos días, la Justicia finalmente le concedió el beneficio de permanecer en su domicilio del barrio de Constitución. Pero también le fijó varias reglas de conducta que la expresidenta deberá cumplir si no quiere que se le revoque la reclusión domiciliaria.
“Le impusieron la obligación de abstenerse y de adoptar comportamientos que puedan alterar la tranquilidad del vecindario, y alterar la convivencia pacífica de los habitantes, es decir de los vecinos, y en 48 horas, la expresidenta deberá presentar una nómina de las personas que integran su grupo familiar, la custodia policial, y los profesionales médicos y abogados que la suelen visitar en su domicilio”, empezó explicando Sergio Farella en TN, lo que fue interpretado por muchos como una prohibición para salir al balcón de su casa.

“¿Hay una cantidad de personas límite para que vivan con ella?”, le preguntó Federico Wiemeyer.
“No, pero sí en cuanto se va a tener que justamente señalar en esta nómina, que la pueden visitar, eso es su círculo familiar, no dirigentes políticos, y habla de profesionales médicos y abogados. Eso es lo que acaba de establecerse en la resolución que firmó el juez Gorini en el domicilio de la calle San José 1111, piso 2°, y las condiciones que la acaba de quitar es eso”, le contestó.
Cristina Kirchner deberá usar tobillera
Pero además, la expresidenta deberá usar tobillera electrónica, una de las demandas planteadas por los fiscales de la causa Vialidad.
Estas condiciones serán supervisadas cada tres meses por la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal. Y, en caso de no cumplirse, la Justicia podría revisar este beneficio y decidir que Cristina Kirchner vaya a otro domicilio o incluso a una cárcel ordinaria.
