La investigación por el asesinato de César Darío Rodas, un artista callejero que fue hallado descuartizado en Guaymallén, sumó un nuevo capítulo estremecedor.
En las últimas horas, los investigadores confirmaron que la víctima fue sometida a torturas durante al menos cinco horas antes de morir.
Según reconstruyeron los peritos, todo comenzó con una discusión en una vivienda ubicada sobre la calle Adolfo Calle al 1978, donde Rodas era el inquilino.
El primer ataque habría sido con una pala de jardín, dirigida a los pies de Rodas, lo que provocó su caída. Desde ese momento, comenzó lo que los fiscales describen como “un horror indescriptible”.
Durante ese prolongado período, Rodas fue agredido con una manopla, una pata de cama maciza y la misma pala de jardín. “La causa de muerte no se ha podido determinar. Suponemos que se desvaneció por los golpes. El cuerpo está, literalmente, dividido”.
Entre los elementos incautados, la Policía halló una Biblia ensangrentada, que la víctima habría sido obligada a leer mientras era atacada. Además, una botella de cerveza fue secuestrada para ser peritada, ya que se sospecha que Rodas también fue abusado sexualmente con ese objeto durante las torturas.
Luego de cometer el asesinato, los agresores escondieron el cuerpo de Rodas debajo de una cama y, al día siguiente, lo desmembraron quemándolo en una parrilla.
Quiénes son los detenidos por este aberrante asesinato en Mendoza
Por el hecho fueron detenidos Adriana Suárez, quien ya cumplía prisión domiciliaria desde 2020 por un robo agravado, su pareja Marcelo “El Porteño” Altamirano y Ángel Quiroz, de 32 años, como partícipe necesario.
Suárez y Altamirano ya fueron imputados por “homicidio agravado por ensañamiento”, delito que prevé prisión perpetua. En tanto, Quiroz fue detenido por orden de la fiscal Andrea Lazo, a cargo de la causa.
Durante su arresto, Suárez intentó justificar el crimen afirmando que Rodas había abusado sexualmente de una de sus hijas, una adolescente de 16 años.
Sin embargo, desde la Fiscalía de Homicidios descartaron esa versión: los peritajes realizados por el Cuerpo Médico Forense a las cinco menores de la familia, de 6, 9, 11, 13 y 16 años, no arrojaron indicios de abuso.
