Wanda Nara aceptó finalmente entregarle sus dos hijas, Francesca e Isabella, a su padre, su expareja Mauro Icardi, el viernes pasado, tal como se lo había exigido la Justicia. Pero antes se vivió un nuevo escándalo en medio de la entrega, que se pudo resolver gracias a la intervención de una psicóloga especializada en manejos de crisis.
Todo se desmadró cuando la conductora se resistió a la entrega de las menores que, tras el fallo judicial por el régimen de visitas, debían pasar una semana con el futbolista antes de su partida a Turquía para reincorporarse al Galatasaray.
Fue así que, para destrabar la difícil situación y tras varias horas de tensión durante las cuales la empresaria hizo de todo para evitar que sus hijas fueran con su ex, intervino una psicóloga policial que tuvo las palabras justas para convencer a Wanda, de acuerdo con lo que reveló la periodista Yanina Latorre en su programa Sálvese quien pueda.
“La profesional fue muy clara con Wanda. Le dijo que, si seguía intentando demorar el encuentro o si elevaba el nivel de tensión, eso iba a perjudicarla más adelante”, contó Latorre.
Y prosiguió: “La psicóloga le marcó que, si no colaboraba, su comportamiento podía ser interpretado como obstrucción y no era favorable para ella ni para las nenas”.
“Ella estaba destruida, llorando, pidiendo más tiempo. No lo hacía desde el capricho, lo hacía desde el miedo, desde la emoción”, agregó Yanina, y explicó que la intervención de la psicóloga fue clave para lograr la revinculación de las nenas con el jugador.
El rol fundamental de la psicóloga policial
“No la retó, pero le habló con mucha firmeza. Le explicó que en ese momento no era solo una madre angustiada, sino una figura bajo evaluación judicial, y que todo lo que hiciera podía tener consecuencias a nivel legal”, manifestó.
“La situación se calmó después de eso. Wanda entendió que no podía oponerse más y decidió colaborar, aunque le costó muchísimo”, cerró.
