Tenés poco tiempo para comer o estás sin ganas de ponerte a cocinar y te acordaste que te quedaba una porción de pizza de la semana pasada que guardaste en el freezer. Lo más lógico es descongelarla y calentarla en el microondas, pero no todos los recipientes son los ideales para ello.
¿Qué te conviene más, un plato de vidrio, de plástico o de melamina? Por si no lo sabés, no todos los recipientes son aptos para calentar o cocinar en un horno a microondas, de ahí que las recomendaciones del fabricante o de los expertos sean fundamentales a la hora de prepararte tu comida.
En primer lugar, seguro que sabés que los recipientes de metal están prohibidos en los microondas, porque este material puede generar chispas al reflejas el metal las ondas electromagnéticas en lugar de permitirles penetrar en los alimentos, con el riesgo de que dañes el equipo o directamente se prenda fuego.
Qué material es el ideal para calentar una pizza en el microondas
Pero entre las otras opciones que tenés a tu disposición, los especialistas te recomiendan que te inclines, en la medida de lo posible, por el vidrio, porque es resistente al calor, no se deforma ni se derrite, y tampoco reacciona ante las ondas electromagnéticas. Además, al ser un material inerte, no transfiere ningún tipo de olor o sabor a la porción de pizza que te vas a comer.
De todos modos, te conviene evitar los recipientes de vidrio fino o delgado, porque se pueden quebrar al cambiar de temperatura en el microondas. El más recomendado es el vidrio templado, que es más resistente y duradero.

En cuanto al plástico, no conviene usarlo en el microondas, salvo que haya sido fabricado especialmente para su uso en esta clase de hornos. Es que algunos plásticos pueden contener sustancias químicas como el bisfenol A (BPA) o los ftalatos, que pueden ser perjudiciales para la salud y que pueden migrar a los alimentos al calentarse. Además, si lo usaste desde hace mucho, el plato de plástico se va degradando y libera más sustancias.
Por último, la melamina tampoco es una buena opción, ya que puede degradarse con el calor y liberar sustancias químicas o volverse quebradiza.
