Un doble crimen estremecedor en Melbourne conmocionó a Australia luego de que la policía detuviera a un hombre acusado de asesinar a Athena Georgopoulos, de 39 años y embarazada de cinco meses, y a su pareja, Andrew Gunn, de 50.
El hecho ocurrió el lunes por la noche en Mount Waverley, cuando vecinos alertaron a las autoridades tras escuchar gritos desesperados desde la vivienda. Al ingresar, los efectivos encontraron una escena macabra: Gunn había sido decapitado y Athena yacía sin vida a su lado, en una casa cubierta de pintadas amenazantes.
“Recibimos un llamado por un control de bienestar tras escuchar gritos. Minutos después, una segunda llamada indicó que la situación era más urgente. Cuando llegamos, encontramos a la pareja sin vida”, declaró el inspector Dean Thomas, de la Brigada de Homicidios, a 9 News.

ARRESTO DEL SOSPECHOSO Y DATOS DE LA INVESTIGACIÓN
El sospechoso fue detenido durante la madrugada del martes en la estación de tren de Westall, a solo seis kilómetros de la escena del crimen. Vestía una remera blanca manchada de sangre y fue reducido por los agentes en el andén.
La policía confirmó que se trata de un hombre sin techo que conocía a las víctimas. Por el momento, no se investiga a ninguna otra persona vinculada al caso. El acusado fue imputado por dos cargos de homicidio y comparecerá ante el tribunal de Melbourne este miércoles. “Parece ser un ataque dirigido”, afirmó el inspector Thomas.
Uno de los aspectos más inquietantes es la presencia de graffitis con mensajes agresivos en las paredes y el cerco de la vivienda, pintados en colores amarillo, verde y negro. Las frases incluían palabras como “Ya basta”, “traición” y “Karma”.

Las autoridades investigan si estos mensajes están directamente relacionados con el crimen o si forman parte de otro episodio. “La Brigada de Homicidios trabajará para establecer si tienen relevancia en la investigación”, informaron desde la policía.
EL DOLOR DE LA FAMILIA
La noticia golpeó duramente a los allegados. Athena Georgopoulos esperaba con ilusión a su primer hijo.
“Ella estaba tan feliz, nunca pensó que podría ser mamá”, expresó su tía, Patty Dilveridis.

Athena cuidaba de su madre, quien quedó devastada por la tragedia. Hasta el momento, el móvil del crimen sigue siendo un misterio, aunque medios australianos apuntan a que podría estar vinculado al consumo o tráfico de drogas. Las autopsias serán realizadas este miércoles para avanzar en la causa.