Ya se cumplieron 25 años de la trágica muerte de Gilda. En el apogeo de su carrera, la cantante de música tropical falleció en un terrible accidente de tránsito en el sur de la provincia de Entre Ríos, durante una gira.
El choque del ómnibus que transportaba a la artista y su banda ocurrió en la ruta 12, cerca del Puente Zárate-Brazo Largo, en el kilómetro 129, y junto con Gilda viajaban su mamá y sus dos hijos, Mariel y Fabricio Cagnin, fruto de su relación con Raúl Cagnin.
En el luctuoso accidente fallecieron, además de la “virgencita bailantera”, su mamá, su hija y tres músicos de su banda. Mientras que Fabricio, que en ese entonces tenía 8 años, sobrevivió.
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Fabricio cuida el legado de Gilda
Su hijo sigue a cargo de cuidar su legado y que el recuerdo artístico de su mamá no se pierda. Porque por más que el terrible choque haya ocurrido en 1996, Fabricio nunca dejó de tener presente a todos los miembros de su familia que perdió ese día. Empezando por su madre.
Justamente, cuando se cumplieron 20 años del accidente, Fabricio se juntó con Natalia Oreiro, quien interpretó a la cantante en la película “No me arrepiento de este amor”, título además de uno de los grandes hits de Gilda.
En ese momento, el joven, que hoy tiene 33 años, estuvo presente en el rodaje del film. Testigo de esa presencia fue la foto que se sacó con la actriz nacida en el Uruguay.
Hoy, Fabricio sigue con su tarea de difundir la obra de su famosa mamá, para que las nuevas generaciones que no tuvieron la oportunidad de escucharla en vivo, puedan conocer el peso que tuvo en la movida tropical de los años ’90.
