Signos, la nueva serie de El Trece, dio el puntapié inicial con un capítulo que mostró en su comienzo la cara buena de Antonio, la del médico de sonrisa afable y querido por todo el pueblo de San Rafael de los Penitentes.
Tras curar a un hombre que resultó herido durante una peregrinación, el personaje de Julio Chávez dejó ver su otra cara: la del hombre que mata a un vecino por cada signo del zodíaco. Así, en su guarida, asesinó a Rafael, el director del colegio.
También confesó ante el cura del lugar que dio muerte a su hermano. Para sorpresa de todos, el religioso se convirtió luego en otra de sus víctimas fatales.
Son su hermana Laura (Claudia Fontán) -una policía ama de casa algo sufrida y cariñosa- y su exmarido Pablo (Alberto Ajaka) -el fiscal del pueblo vecino- los encargados de investigar estos misteriosos crímenes que aterrorizan a los vecinos, que irán muriendo mes a mes, sin entender por qué Antonio los odia en silencio desde hace tanto tiempo.
