Tras haber cumplido 21 años de casada con Guillermo Andino, Carolina Prat recordó algunas de las anécdotas más felices vividas junto al conductor de TV aunque puedan ser un tanto vergonzosos. En ese sentido, eligió rememorar su fallida experiencia en una playa nudista.
Lo que sucedió fue que Carolina Prat fue a esta particular playa con Guillermo sin pensar demasiado en que podrían encontrarse turistas argentinos que los reconocieran. "Fue tremendo. Yo quería que la tierra me tragara. Lo peor de todo es que me cubría con las manos y eso era peor”, reveló en el programa “Es por ahí”, de América.
Por su parte, Guillermo se sumó al relato con un tono divertido para hablar al respecto: "Después de recorrer todas las playas fuimos a Orient Beach. Dijimos 'acá no debe haber nadie. No existían los teléfonos...'”. “Y menos mal que no existían tampoco las redes sociales”, agregó Prat.
Antes de cerrar, el conductor de TV también contó que existe una foto suya con un fan ¡desnudos! "¿Te acordás que viene un hombre con toda su familia y dice ‘¡Andino! ¡Andino! ¿Podemos hacer una foto?’”, contó el periodista, entre risas. “Hay una foto que estamos todos agarrados en pelotas”, cerró.
Guillermo Andino y Carolina Prat celebraron un nuevo aniversario de casados y recientemente también compartieron cómo fue la insólita conquista. La reconocida pareja reveló con qué logró enamorar el comunicador a su actual esposa. "Yo estaba en Canal 9 porque nos teníamos que encontrar con unos compañeros de la facultad. Yo estudiaba arquitectura, se nos había ocurrido hacer un trabajo sobre el canal. Ahí pasa Guille y me pregunta si estaba para un casting", expresó Prat.
"En ese momento estaba lleno de castings para programas. Me llamó la atención y le pregunté... me acuerdo que tenía que hacer el noticiero, le dije que me espere... prácticamente le rogué", recordó Andino. "De verdad, no sabía si iba a quedarse. Cuando termino, paso por el kiosco y le compré un alfajor", contó, a lo que Carolina sumó: "Yo vivía con mi mamá y mi hermana lejos de Capital. Tenía 2 horas de viaje en colectivo e iba tan feliz con mi alfajor".
