Una amiga de Nora Dalmasso, la mujer asesinada en 2006 en Río Cuarto, Córdoba, declaró este miércoles en la octava audiencia del juicio por jurados que se lleva adelante en esa ciudad. María de Carmen Pelleriti, de 61 años, cuestionó la investigación y afirmó: “Mientras buscaban amantes, se escapó el asesino”.
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Según publicó TN.com.ar, la mujer había conocido a Dalmasso por los hijos de ambas, que eran compañeros en la escuela. Juntas compartían caminatas semanalmente.
Durante su declaración, Pelleriti sostuvo que la pesquisa fue “morbosa” y que a Dalmasso la asesinaron varias veces. “Fue un femicidio contra una mujer, la revolcaron y la pisotearon mil veces”, afirmó.
En ese sentido, consideró que durante la instrucción de la causa “salieron en la búsqueda de amantes (de Nora) y no de un asesino” y remarcó que “mientras buscaban amantes se escapó el asesino”.
Sobre el culpable de la muerte de Dalmasso, Pelleriti apuntó directamente contra el viudo y único acusado, Marcelo Macarrón, de 62 años, y contra su primer abogado defensor, Daniel Lacasse. Según ella, son quienes se beneficiaron con lo ocurrido.
Según señala la agencia Télam, la mujer hizo referencia a un eventual divorcio de la pareja, ya que ratificó una declaración que brindó con anterioridad, en la que recordó que Dalmasso le había comentado que si se separaba de su marido tendría “muchos problemas”.
También dijo sobre el abogado que “es mejor tenerlo de amigo que de enemigo” y aseguró que fue el temor hacia él lo que detuvo a Dalmasso de encarar el divorcio de Macarrón, ya que era quien lo representaba en los asuntos legales. “Nora le tenía terror”, dijo la testigo, al tiempo que advirtió que si la encuentran muerta tras sus dichos “busquen a Lacasse”.
Tras esos dichos, el abogado Marcelo Brito, defensor de Macarrón, le preguntó a la testigo si tenía pruebas contra el viudo por el crimen de Dalmasso, a lo que ella respondió de manera contundente que “no”.
Macarrón es el único imputado en este proceso y responde por el delito de “homicidio calificado por el vínculo, por alevosía, y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal”, que contempla prisión perpetua.
Por otra parte, la mujer defendió a su amigo Michel “El Francés” Rohrer, el empresario apuntado por los hijos de Macarrón, Facundo y Valentina, como presunto sospechoso del asesinato. Pelleriti manifestó que en la fecha del crimen se encontraba en Buenos Aires y no en Río Cuarto.
Asimismo, la testigo también arriesgó la hipótesis de que “la persona que mató a Nora la estaba esperando en la casa” y dijo que, a su parecer, el asesino “tenía la llave porque Nora era muy cuidadosa cuando salía y cerraba todas las puertas”.
También indicó que “si Nora esperaba a alguien no se habría sacado el maquillaje”, en referencia a que la víctima estaba desmaquillada cuando fue encontrada muerta en su casa del country Villa Golf de Río Cuarto en el sur provincial.
