En su escrito entregado durante su declaración indagatoria ante el juez federal Sebastián Casanello, Fabián Rossi, el presunto armador de las sociedades offshore de Panamá por donde se habría sacado dinero de Lázaro Báez en la denominada "ruta del dinero K", admitió que ayudó a "contar dinero a los empleados de tesorería" de la exfinanciera SGI.
El ex de Iliana Calabró negó conocer "de quién era, de dónde venía ese dinero, ni qué se habría de hacer con él", minimizó su actuación en "La Rosadita" al asegurar que sólo se dedicaba a "hacer marketing y relaciones públicas" e incluso confió que normalmente "era quien iba a Carrefour" y "servía café a los clientes".
Rossi estuvo pasando los últimos días entre Baradero, donde su hermano tiene una casa en un country, y en la casa de su madre en el barrio porteño de Núñez. En una charla telefónica con Noelia Antonelli para El diario de Mariana, el hombre más buscado rompió el silencio. "No es mi política ni la que me exigen los abogados hablar con la prensa. Te habrás dado cuenta que en tres años nunca di una nota ni nada por el estilo. No doy notas a la prensa, todo lo que yo diga va a ser en sede judicial como lo he hecho y estoy a disposición de la Justicia como corresponde y como tiene que ser. Obviamente y claramente, soy un hombre muy preocupado", reconoció.
"Es incómodo que no haya ninguna explicación después de verte en un video contando dinero", apuntó la panelista. "Vos como periodista tenés acceso a mi declaración de hace una semana. Son más de 20 páginas de explicación. Así que simplemente tenés que ir al expediente y fijarte", se mostró esquivo El Rossi.
"¿No te parece subestimar a la gente decir que estabas en una financiera sirviendo café?", indagó Antonelli. "No, el periodismo extrajo esa frase de 20 páginas. Trabajé toda la vida en gráfica y sé lo que es un copete, un título, un epígrafe y sé cómo hacerlo. Doy por terminada la charla. No puedo seguir hablando, me hace muy mal", concluyó.
