El Gobierno decidió que no va a asistir a los argentinos varados en el exterior tras la reducción de ingresos. El Estado ha decidido establecer una posición clara en medio de la situación que atraviesan las personas que han salido del país en las últimas semanas y que ahora quieren regresar.
Estos argentinos vieron recientemente cómo eran reprogramados sus vuelos, o directamente cancelados, como consecuencia de la significativa disminución del cupo de pasajeros que pueden ingresar al país para evitar el contagio de los nuevos brotes de coronavirus.
Este último decreto, firmado por el presidente Alberto Fernández, indicó que el cupo de ingreso diario se reduzca de 2.000 a 600 pasajeros, lo que ha obligado a las aerolíneas a reprogramar los vuelos y que los argentinos que se encuentran fuera del país deban reorganizarse hasta que la situación vuelva a la normalidad.
El Gobierno no hará gestiones para repatriar a las personas ni los asistirá económicamente. Tampoco tiene estipulado brindarles una logística para que puedan estar más cómodos en la espera que les toque llevar adelante. Ante esto, los que quedaron varados en el exterior deberán esperar a que las aerolíneas les den opciones para volver al país y se tendrán que pagar los costos que les genere esta demora.
En medio de esta situación, el Gobierno se ha amparado en los múltiples avisos públicos por parte de los funcionarios en donde recomendaban a la gente que no saliera del país, advirtiéndoles que, en algún momento, podían existir medidas restrictivas que complicaran su regreso, junto con la declaración jurada que cada pasajero firma al viajar, en la que asume el riesgo de que haya cambios en el plan estipulado.
Esta declaración jurada, que se debe firmar desde el 25 de diciembre de 2020, reza de la siguiente forma: “La salida del país implicará la aceptación y asunción de las consecuencias sanitarias, legales y económicas derivadas de la misma y del eventual reingreso a la Argentina, luego del cual deberá darse cumplimiento a las condiciones impuesta por la autoridad sanitaria nacional y someterse al control de las autoridades provinciales, municipales y de la Ciudad de Buenos Aires”.
Además, el Gobierno sostiene que la gente que tuvo que reprogramar su regreso es parte de un “universo ínfimo” con respecto a la población total del país. Durante los últimos 120 días salieron del país cerca de 107 mil argentinos, de los cuales el 40 por ciento manifestó que lo hacía por turismo. De ese total, 28.700 están en Estados Unidos, 27.500 en España, 5.900 en Uruguay, 5.500 en Chile y 5.000 en Francia. Según los datos que manejan en el Gobierno, el 30 por ciento está residiendo en el exterior. Es decir que la suma que pretende volver al país se reduce ampliamente.
