El policía de La Pampa envenenado por su pareja rompió el silencio: “Creía que tenía un infarto”, afirmó. Gabriel Páez Albornoz, un agente policial de Seguridad Rural de La Pampa tenía un crítico estado de salud después de haberse intoxicado con un batido envenenado que le preparó su pareja. En medio de la investigación, las sospechas señalaban a la mujer, quien luego reveló que era víctima de violencia de género. Sin embargo, a pesar de esto, quedó detenida por presunto intento de homicidio.
Después de haber pasado casi tres meses del hecho, Albornoz ofreció su versión sobre el dramático episodio que vivió. De acuerdo con la información revelada, ese día pasó por su casa a buscar “un disco y verduras”, ya que tenía una cena en la División Seguridad Rural y su mujer le ofreció el licuado. Justo cuando recuperó la conciencia ya habían transcurrido cuatro días y su jefe le contó todo lo que había pasado.
“Me tomó de la cabeza y me habló con mucha paciencia. Me dijo que había una investigación en curso porque había sufrido un supuesto envenenamiento, y que mi pareja estaba detenida”, rememoró el hombre.
Entretanto, el agente mencionó que aún ve con gran incredulidad todo lo que le contaron, e incluso destacó: “Yo creía que tenía un infarto... porque eso sentí cuando me desmayé. Un fuerte dolor en el pecho y después no me acuerdo más de nada”. Además, el policía no puede creer que la mujer con la que tenía una relación desde hacía 14 años y un hijo en común, haya querido quitarle la vida, aunque admitió que tenían “discusiones de pareja”.
Al ser interrogado sobre los presuntos hechos de violencia de género a los que sometía a su compañera, el funcionario afirmó: “Eso no es verdad. Eso es mentira. Yo adoro la vida. Pero no quiero hablar de algo que está en manos de la Justicia”.
