No solo la Argentina llora la muerte de Diego Maradona. En Nápoles, su segunda casa futbolística, los fanáticos del Napoli crearon un santuario al lado del estadio San Paolo, donde el Diez maravilló a los napolitanos entre 1984 y 1991. Allí, cientos de hinchas del club que ganó sus dos únicos títulos del campeonato italiano (el famoso “Scudetto”) gracias a Diego, se acercan desde que se enteraron de la noticia de su muerte para dejar una ofrenda.
En TN, un enviado especial contó sus sensaciones al recorrer el santuario que levantaron los “tifosi” napolitanos.
“Debe haber por lo menos 100 metros. Yo puedo seguir y bordear, esta es la ‘Curva B’ del estadio. Vamos a ir caminando de a poco. Yo te decía, cuando arrancamos, que es sorprendente, si uno lo compara con las imágenes de la marcha de antorchas que hubo ayer, que fueron imágenes muy ‘argentinas’, si querés, nosotros hubiésemos hecho lo mismo, con el respeto que hay ahora, de hecho, todo lo que está acá son objetos preciados de la gente. No solamente una vela o un ramo de flores. La gente dejó los banderines clásicos o las bufandas que se usan tanto aquí. Está lleno de camisetas del Napoli de la época de Maradona, camisetas que tienen 35 años. La gente vino y la dejó acá. Es decir, son piezas que no tienen ningún tipo de valor económico, pero que, al mismo tiempo, tienen un valor sentimental apabullante para la gente. Pasan, sacan fotos, se quedan a mirar, discuten”, explicó el notero de TN.
Y agregó: “Hace un ratito, un grupo de hombres mayores debatían la eterna cuestión que ha hecho de Maradona lo que Maradona fue. Que es la diferencia entre el deportista extremo y el hombre con errores. Que es lo que nos acercó a todos a Maradona, porque no era perfecto. Y debatían eso, y había un hombre grande que gritaba y decía ‘Este es el Maradona hombre, no es el jugador de fútbol lo que están viendo acá’. Lo que la gente ve acá es el Maradona que hizo por Nápoles lo que los napolitanos le agradecen. Por cierto, este estadio acaba de cambiar de nombre. Y Nápoles es, al mismo tiempo, una ciudad muy religiosa. Así que cambiarle San Paolo por Diego Armando Maradona tiene una connotación claramente religiosa”.
Museo
Otra muestra de la devoción de la ciudad por su hijo pródigo es el museo en honor a Maradona que montó la familia Vignati en el barrio obrero de Secondigliano.
El patriarca de la familia, Saverio Silvio, fue durante 35 años el custodio del estadio San Paolo; su esposa, Lucia, fue cocinera y ama de llaves de la casa de Maradona en la vía Scipione Capece, y la hija de ambos, Raffaella, cuidó de las dos hijas que el argentino tuvo con Claudia Villafañe, Dalma y Giannina.
Hoy, tras el fallecimiento de Saverio, uno de sus hijos, Massimo, está a cargo del museo, que posee todos los objetos que les regaló el Diez durante los años que vivió en la ciudad. “Este museo nació tras la muerte de mi padre, que tenía todo en el estadio San Paolo. Entonces decidimos llevarnos todo por seguridad", explicó.
Entre los objetos que se exhiben, están por ejemplo los botines que el futbolista calzó en el Mundial de 1986 y dos camisetas del Napoli que atestiguan la influencia del astro: una sin insignias y otra con el primer "Scudetto" de 1987 y la Copa Italia bordados en el pecho. Además, se puede ver una fotocopia del contrato de su paso del Barcelona al club italiano, mochilas, recortes de prensa, un rosario, remeras o hasta su banco en el vestuario del mítico estadio.
