Al igual que muchos otros famosos, Mirtha Legrand cumplió con su deber cívico. La diva ingresó a La Rural para votar de cara a las elecciones legislativas de este año. Su presencia en el predio no pasó desapercibida ya que algunas de las personas que se encontraban emitiendo su voto en el mismo momento en que la diva de los almuerzos apareció, la filmaron para dejar registrado que a sus 94 años, su compromiso con la democracia y el país, continúa intacto.
Para asistir a La Rural, la conductora eligió lucir un traje en tono verde agua y un barbijo. “Fue todo espléndido, hace tiempo que no estaba en contacto con el público. Me gritaban: ¡reina, reina! y me saqué muchas fotos”, le dijo Mirtha a Teleshow sobre los pocos minutos que estuvo en el predio.
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“Anoche no dormí por la emoción de votar”, se sinceró la legendaria conductora. “Voté en La Rural y me acompañó Elvira, una enfermera y mi chofer Marcelo”, añadió en el mismo sentido.
Mirtha Legrand fue dada de alta el 12 de octubre del sanatorio Mater Dei, tras haber sido operada el 30 de septiembre por una obstrucción coronaria. La familia y el médico que la atiende se reunieron con el cardiólogo del sanatorio y juntos decidieron que siguiera la recuperación en la tranquilidad de su hogar. La determinación de ambas partes fue comunicada a través de un parte médico. “Se fue a su casa, vinieron Nacho -Viale-, el padre de Nacho y Marcela -Tinayre-, con el médico de cabecera”, habían informado las fuentes médicas.
Nacho Viale habló de la mejoría de Mirtha Legrand: “Hizo entrar a la clínica a la cosmetóloga, la peluquera y la maquilladora"
Hace poco más de un mes, Nacho Viale dialogó con Dario Barassi sobre la salud de su abuela, Mirtha Legrand, quien se encuentra recuperándose después de someterse a una intervención coronaria en el Mater Dei.
"Mi abuela está muy bien. Si Dios quiere, lunes o martes se va a la casa", comenzó contando en aquél entonces para luego, sumar un dato íntimo que demuestra el ánimo que tuvo la diva durante su internación. "Me sonó el teléfono, era desde el sanatorio y me asusté. Y me mandaron un listado: ‘Está toda esta gente para entrar’, me dicen. Yo miro el listado, conocía a todos. ‘No, que no entre nadie, porque sino es un caos’. ‘Pero las está haciendo pasar tu abuela’, me dijeron. La llamé y le digo: ‘Abuela, escuchame…'. ‘No, yo estoy aburrida...’, me respondió. Me fijé y era cosmetóloga, peluquera, maquilladoras".
