Parecen la pareja ideal, pero lo cierto es que no viven la vida en color de rosa. Al menos, así lo hace saber Paulita Chaves, quien demostró que su marido, Pedro Alfonso, puede no ser lo tan buen compañero que se muestra delante de las cámaras. En una mañana de furia, Paula sacó los trapos al sol y los reclamos llovieron con intensidad en medio de la pareja.
Según mostró la modelo, algunos hábitos de su marido son muy contraproducentes para la convivencia. En primer lugar, se quejó del método que el actor y productor usa cada mañana para comenzar el día: demasiadas alarmas que alteran la vida de la familia y ya predisponen a encarar el día de mal humor.
En segundo lugar, la higiene: a la conductora no le gusta nada que su esposo sea desprolijo en la delicada limpieza del baño, donde, de no cuidarse al máximo los detalles, se puede crear un verdadero veneno contra el romanticismo de la pareja.
Puede que Paulita haya comenzado el día con el humor torcido, pero lo cierto es que con unos pocos ajustes, su pareja está lejos de correr peligro. Con una sola alarma y un poco más de atención en el orden de la casa, Peter tiene la felicidad asegurada para el resto de su vida con una familia ejemplar.
¡A cuidarla, Pedro!
