Un hombre fue a comprar en sulky a una cadena de comidas rápidas pero no quisieron atenderlo porque no iba en auto. Este hombre afirma que se sintió “humillado” después de que una reconocida cadena se negara a servirlo en un servicio de “drive thru”, especializado en atender automóviles, mientras montaba su carreta tirada por su caballo.
Ian Bell, de 55 años, llegó en su vehículo la semana pasada a la ventana del local de Kentucky Fried Chicken, ubicado en Carlisle, Cumbria (norte de Inglaterra), solo para que un gerente saliera y le dijera que debía retirarse del lugar para resguardar la salud y la seguridad de los demás clientes.
Bell afirmó no entender la situación, ya que su caballo, llamado Jon Jon “es tan bueno como el oro. El caballo y las carretas circulaban mucho antes que los automóviles”. En las imágenes que fueron divulgadas en Internet, se puede ver como Bell y Jon Jon están parados frente al negocio.
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"Me había puesto en la cola detrás de algunos autos y estaba a punto de pedir mi comida cuando de repente este gerente salió y dijo que no se me permitía pasar. No podía creer lo que estaba escuchando, no había hecho nada malo. Jon Jon se estaba portando bien, estaba callado como un cordero, es un caballo muy bien educado”, afirmó Bell.
Este hombre señaló que tuvo que ir a otra cadena de comidas rápidas para poder comprar su comida, en donde lo atendieron sin problemas. “Creo que la manera en que me trataron en KFC fue francamente desagradable y discriminatorio contra las personas que usan caballos y sulkys”.
