River volvió a fallar, como en los últimos encuentros, en el momento de liquidar el juego, y aunque dejó una mejor imagen que Estudiantes, no pudo regalarle el triunfo a la multitud que lo acompañó al estadio de Huracán, donde hizo de local.
Lucas Alario había puesto en ventaja en el primer tiempo, de tiro penal, y en el segundo tiempo, Carlos Auzqui selló la igualdad con un cabezazo después de una mala salida de la última línea millonaria.
El primer tiempo tuvo buen ritmo, con dominio territorial y de la pelota por parte de River, aunque Estudiantes mostró cualidades para lastimar.
Con un buen trabajo y movilidad de Ignacio Fernández, Andrés D'Alessandro, Gonzalo Martínez y Sebastián Driussi, River dominó la zona media, pero le faltó imponerse en el área, ante una defensa bien parada.
Estudiantes jugó incómodo, porque River ahogó su salida al tomarle sus volantes centrales. Así, el equipo platense optó por avanzar por las bandas, y fue por la izquierda por donde encontró su mejor resquicio para desbordar. A los 21, el uruguayo Matías Aguirregaray envió un centro y Augusto Solari estrelló su cabezazo en el travesaño.
Ese llamado de atención tonificó a River, que a los 29 lo tuvo dos veces: primero con una imperfecta definición de Alario y luego con un combazo de D'Alessandro que se fue apenas desviado.
Al primer tiempo le quedaba la polémica, porque sobre los 42, Diego Abal cobró penal de Leandro Desábato sobre Camilo Mayada y Alario, con un potente derechazo desniveló el marcador.
En la segunda parte, el juvenil arquero Sappa le sacó dos veces la chance de aumentar a River, ya que se lució al tapar un disparo de Gonzalo Martínez y después desvió y tuvo al palo como aliado tras un anticipo del ecuatoriano Mina.
Nelson Vivas arriesgó con los cambios y en una mala salida del paraguayo Jorge Moreira Estudiantes aprovechó y llegó el empate. Se jugaban 14 minutos cuando al ingresado chileno Jeisson Vargas tomó la pelota sobre la derecha y envió un centro preciso para que aparezca Auzqui y con un frentazo decrete el 1-1.
De ahí en más, se jugó casi siempre en campo de Estudiantes, pero si bien River dominó la pelota, ya no tuvo la energía y la precisión para volver a ponerse en ventaja y así achicar las siete unidades que lo alejan de la cima de las posiciones.
