Un confuso hecho policial y una nueva separación es lo que enfrenta Morena Rial y Facundo Ambrosini. Dos meses se mantuvieron unidos luego de la anterior separación que incluyó violencia de género y una posterior desestimación de la denuncia por parte de Morena.
Según relataron desde Los Ángeles de la Mañana tuvieron una madrugada que incluyó cuatro patrulleros en la casa y una discusión entre ambos. “Ayer a la noche estuve en comunicación con Facundo. Están separados, pero no hay denuncia formal de ninguna índole porque nada ocurrió, en realidad. Solo estaban discutiendo y no se ponían de acuerdo con unos temas personales relacionados con ropa y valijas. Nada más, pero nada serio”, contó el abogado de Ambrosini, Federico Albano.
"Hubo una discusión, no hubo maltrato físico ni de palabras y Facundo concluyó que lo mejor era irse de la vivienda. No es cierto que la policía lo invitó a irse. Se retiró por su propia decisión, que tomó junto conmigo para no perjudicar nada de la relación con Morena y con su hijo”, agregó.
Por su parte, Morena salió a hablar también con Andrea Taboada y aclaró lo sucedido: "Estoy bien. Los dos estamos bien. Nosotros queremos lo mejor para Fran, es nuestra prioridad. Terminamos bien, pero ahora no hubo violencia ni golpes”.
Sin embargo, continúan las repercusiones. En diálogo con Ángel de Brito en su programa El Espectador, reveló contundente: "Ambrosioni se quería llevar varias cosas que no le pertenecían. Yo le recomendé a Morena que llamara al 911 y ahí se frenó todo", ""Traté de mediar con su letrado y con él y se tranquilizó la situación. Pero había que ponerle un punto final, no se puede tolerar esto. Acá no hubo lesiones".
Sobre cómo seguirá la causa, definió: "Me voy a comunicar con su letrado y vamos a arreglar las cuotas alimentarias y el régimen de visitas".
Ante un posible envolucramiento de Jorge Rial, el abogado detalló: "No hablé con Jorge Rial porque no vi la necesidad de llamarlo y Morena no me lo indicó".
El escándalo continuará.
