A principios de febrero, Joaquín Sabina preocupó a todos sus fanáticos. El músico se cayó de un escenario mientras realizaba un concierto en Madrid junto a Joan Manuel Serrat y fue operado de urgencia por un hermatoma intracraneal y derrame cerebral.
En una fugaz reaparición pública en el programa La Sexta, recordó el momento: "Fue más fuerte de lo que piensan. Llevo hasta dos operaciones, titanio y un hematoma en la cabeza" y reafirmó: "No tengo la menor intención de morirme, que se muera la muerte".
Respecto a las causas de su caída, agregó: “Sé que me enrollé en un cable y que al siguiente paso me pegué el hostión. Pero el hostión fue más fuerte de lo que piensan. Serrat dice que no, que fue una cosa muy rara, pero yo llevo casi 40 años en esto y siempre antes de salir al escenario pienso que eso puede suceder y siempre estoy atento y debí cometer algún error”.
Sobre la cuarentena obligatoria, reveló cuál es su actividad preferida para pasar el tiempo: "Para mí, que soy miedoso, justo no le tengo miedo al confinamiento, porque tengo muchos libros" y se mostró preocupado por le avance del coronavirus: "Últimamente se están muriendo muchos amigos. Es apocalíptico, uno no puede acostumbrarse a este espanto. Yo he sido el tipo más callejero y noctámbulo del mundo... Y eso de que no se pueda abrazar a los amigos. Y sobre todo a las amigas, y a mis hijas”.
